Ciudad de México — El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, aceptó el uso de la energía eólica de la mano del Gobierno de Estados Unidos, tras años de criticarla por sus costos y riesgos asociados al sistema eléctrico nacional por su intermitencia cuando falta el viento e incluso por “contaminación visual”.
El mandatario, conocido como AMLO, informó en su conferencia de prensa matutina del 8 de febrero que lanzará una convocatoria para licitar la construcción de 10 parques industriales en la región del Istmo de Tehuantepec, de los cuales, cuatro serán plantas eólicas en el corredor que atraviesa el estado de Oaxaca y Veracruz.
“Este es un acuerdo con el Gobierno de Estados Unidos para contribuir a enfrentar el problema del cambio climático, van a estar con nosotros el día 19 de marzo en el Istmo y en Veracruz legisladores estadounidenses que vienen con el embajador de los Estados Unidos en México, Ken Salazar”, señaló AMLO, como se conoce al presidente popularmente.
Sin embargo, en la región del Istmo de Tehuantepec, la más próspera del país para energía eólica, actualmente ya no cabe ni un proyecto más de generación de energía sin nuevas líneas de transmisión de electricidad, según dijo a Bloomberg Línea previamente Leopoldo Rodríguez, presidente de la Asociación Mexicana de Empresas Eólicas (AMDEE).
“Hoy esa región está a su máxima capacidad (...) tender nuevos proyectos significativos en la región sí necesitan nueva infraestructura de transmisión”, dijo Rodríguez en una entrevista publicada el 23 de enero.
En mayo de 2020, AMLO criticó la instalación de unos aerogeneradores con energía eólica en la región de La Rumorosa, en Baja California.
El Gobierno de López Obrador canceló la construcción de una línea de transmisión eléctrica al inicio de su administración, que correría del Istmo hacia el Valle de México. Cada kilómetro de línea de transmisión tiene un valor estimado de US$2 millones.
Con las nuevas obras en el Istmo de Tehuantepec, el Gobierno pretende activar el comercio entre el sureste de México y la costa este de Estados Unidos. Lo que ayudará al crecimiento económico de los estados del sur, dijo AMLO.
“El día 21 de marzo vamos a Guelatao (Oaxaca) por la tarde, después de esa ceremonia, vamos de nuevo al Istmo porque es probable que esté John Kerry para lo de los parques eólicos”, adelantó el mandatario.
El propósito es que estos parques sean construidos por empresas mexicanas y estadounidenses y que pertenezcan a la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
AMLO dijo que espera que el financiamiento que provenga de Estados Unidos sea a tasas muy bajas
Los 10 parques del Istmo de Tehuantepec “van a ser licitados, tienen mucha demanda, tiene mucho futuro”, dijo el presidente argumentando que se está creando infraestructura y rehabilitando la ya existente por lo que el istmo “tiene mucho potencial para la industria”.
AMLO dijo que actualmente se está produciendo una planta para producir combustóleo y convertirlo en gasolina con una inversión de alrededor de US$5.000 millones de dólares y del lado del Golfo de México, en Veracruz, Minatitlán, también se está rehabilitando la refinería.
Asimismo, en Coatzacoalcos, Veracruz, está en proceso una planta de licuefacción para transformar el gas y transportarlo congelado para luego regasificarlo en México y en Europa.
También comentó que ya se firmó el contrato para el gasoducto marino de Tuxpan Veracruz a Coatzacoalcos.