Bogotá — Aunque los colombianos, poco a poco le van abriendo el paso a nuevas maneras de pago, el efectivo sigue siendo el rey. Con 78,4%, el efectivo es el instrumento más utilizado en el país, seguido por las transferencias electrónicas (12,6%), tarjeta débito (7,9%) y la tarjeta de crédito (1,2%), según una encuesta del Banrepública para 2022.
Síguenos en las redes sociales de Bloomberg Línea Colombia: Twitter, Facebook e Instagram
Barranquilla (85,4%) y Medellín (81,1%) son las dos grandes capitales en las que más se percibe el uso del efectivo, de acuerdo con los datos del Emisor. En constraste, Bogotá (67,5%) y Cali (74,6%) son las ciudades en las que menos se percibe el uso del efectivo.
Cabe mencionar que de las grandes capitales en mención, Barranquilla (59,7%) es la que más informalidad laboral reportó entre octubre y diciembre de 2022, según el Dane. Le sigue Cali (47,6%), Medellín (39,1%) y Bogotá (33,9%). En el total nacional el promedio de informalidad laboral fue de 57,8% para el periodo de referencia.
Respecto a la tarjeta débito, Cali y Bogotá son las que presentan el mayor uso, con participaciones de 12,8% y 12,5%, las cuales superan en casi 5% al promedio nacional.
Según la encuesta del Banco de la República, “entre las principales razones que justifican la mayor preferencia por efectivo se mencionan la facilidad y rapidez para pagar; la posibilidad de reutilizarlo de manera inmediata; y la costumbre de usarlo para realizar compras de bajo monto o en la calle”.
En un menor porcentaje de importancia se encuentran, entre otras razones, que las compras pagadas con efectivo resultan más baratas (7,6%) y que no disponen de cuentas de ahorro o corriente, tarjeta débito o crédito (6,2%), que se considera menos riesgoso (5,7%).
Otras de las razones por las que se prefiere el uso del efectivo es que no se dispone de aplicaciones para realizar pagos (5,4%), que brinda certeza de que el pago es efectivamente realizado (4,9%), que existe miedo a la clonación de tarjetas débito o crédito (3,1%) y que no queda registro de datos personales (2,7%), dicen los datos del Emisor.
Los datos también arrojaron que se mantiene el mayor uso de efectivo en personas con ingresos bajos (90,6%). “A medida que el nivel de ingresos aumenta, el uso de efectivo va disminuyendo y al mismo tiempo se incrementa el uso de otros instrumentos de pago. Para la población de mayores ingresos, el instrumento de pago más utilizado es la tarjeta débito, con una participación del 44,7%, la cual duplica a la del efectivo (22,3%)”.
Otro de los resultados de la encuesta es que en general, el 56,9% de la población respondió tener al menos un producto financiero, lo que indica que todavía subsiste una elevada proporción del público (43,1%) que no utiliza ningún producto financiero.