¿Por qué es tan difícil emprender en Centroamérica?

Barreras financieras, regulatorias y la incertidumbre por shocks externos son algunas de las causas por las que Centroamérica tiene tasas de creación de empresas débiles

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Bloomberg Línea — En medio de un contexto de prolongado crecimiento económico lento, Centroamérica, región caracterizada por su cultura emprendedora, exhibe tasas de creación de empresas comparativamente débiles.

Entre las barreras que resultan vinculantes para emprender en la región figuran las financieras. Solo el 40% de las empresas formales en Guatemala, Honduras y El Salvador tienen acceso a préstamos o líneas de crédito con el sector bancario, según el reporte Emprendimiento e innovación digital en Centroamérica.

El estudio de la Corporación Financiera Internacional (IFC, por sus siglas en inglés), en colaboración con el Centro Regional para la Promoción de la Micro, Pequeña y Mediana Empresa (Cenpromype), agrega que para financiarse, los emprendedores en Centroamérica obtienen préstamos con casas de empeño o entidades financieras no reguladas, algunas de ellas muy informales, que tienden a otorgar créditos extremadamente costosos a personas y pymes.

Estos préstamos costosos combinados con la falta de habilidades para administrar un negocio, son razones importantes por las que muchos emprendimientos fracasan, según la investigación.

Formalizar una empresa

Las barreras regulatorias también obstaculizan el emprendimiento en muchos países. Iniciar un negocio formal en Honduras toma, en promedio, más de 40 días. En El Salvador, registrar una propiedad toma al menos 30 días en promedio. Sin embargo, solo toma alrededor de 10 días en Costa Rica.

En Honduras, la inscripción de nuevas empresas en 2022 mostró una caída interanual promedio del 5% en los registros mercantiles de Tegucigalpa y San Pedro Sula, las dos principales ciudades del país.

Sobre ello, Yeny Antúnez, oficial de Política Económica del Consejo Hondureño de la Empresa Privada (Cohep) dijo que “esta disminución en la formalización e inscripción de nuevas empresas refleja la preocupación de los empresarios e inversionistas ante la incertidumbre provocada por shocks externos, en el que se destaca el aumento de precios, principalmente de las materias primas; y el clima de negocios en el país”.

Durante 2022, el Registro Mercantil de Guatemala reportó la inscripción de 53.012 empresas nuevas, que significó 2,3% más respecto del año anterior; y en Nicaragua, durante enero de 2023, el gobierno registró la creación de 584 nuevos pequeños y medianos negocios y 3.000 nuevos empleos, aseguró la vicepresidenta Rosario Murillo.

Otros indicadores evaluados

El istmo, a excepción de Costa Rica, también exhibe capacidades limitadas para la expansión empresarial, dice la IFC.

Las empresas formales en Honduras, Guatemala y El Salvador aumentan su número de empleados a tasas inferiores al 3% anual en promedio, mientras que las empresas en Costa Rica crecen a tasas que superan el 4%.

Las empresas formales que sobreviven al menos 20 años son significativamente menos en Honduras, Guatemala y El Salvador en relación con sus pares regionales. Por ejemplo, las empresas formales en Guatemala emplean solo 27 trabajadores después de al menos 20 años, mucho más bajo que el promedio de 55 en Costa Rica.

Guatemala, Honduras y El Salvador también muestran rezagos significativos en los pilares del ecosistema de emprendimiento, es decir, la disponibilidad de factores de producción, como capital físico, capital humano y conocimiento que “juega un papel fundamental en un ecosistema empresarial innovador”, dice el reporte.

Solo el 5% de la población de 25 años o más en Guatemala, Honduras y El Salvador ha completado un título terciario, mientras que en Costa Rica esta fracción es más del 20%, y de estos títulos, el 25% están en ciencias e ingeniería.

Por otra parte, en Guatemala y El Salvador, menos del 1% de las empresas formales tienen 3 años o menos, y esta fracción es solo del 1,8% en Honduras. En Costa Rica esta fracción es más del doble que en Honduras, pero todavía un poco lejos de Colombia (8%) o México (9%).