Ciudad de México — La petrolera estatal Pemex, además de incumplir con su meta de producción petrolera, también falló en materia de gasolina y diésel durante 2022.
Pemex cerró el 2022 con una producción de 257.000 barriles diarios de gasolina y 124.000 barriles por día de diésel, 57% y 63% por debajo de su objetivo, respectivamente, de acuerdo con los datos más recientes de la compañía y documentos públicos con sus metas para 2022.
El promedio anual de producción de gasolina y diésel de Pemex también enfrenta una marcada brecha de 47% y 50%, respectivamente.
Rocío Nahle García, titular de la Secretaría de Energía y encargada de rehabilitar las seis refinerías de Pemex, dijo que a veces baja la refinación de petróleo porque alguna de las refinerías sale de operación para ser rehabilitada.
“Esto se ha ido programando y se ha ido planeando con todos los gerentes y el personal de Pemex”, agregó la funcionaria durante la presentación de las metas de producción de gasolina y diésel en diciembre de 2021 en Palacio Nacional.
Nahle proyectó terminar el sexenio con una utilización del Sistema Nacional de Refinación, que incluye las seis refinerías de Pemex en territorio nacional, de 86% desde el 55% actual.
Una de las razones que han impedido a Pemex aumentar la producción de gasolina y diésel es la terminación de dos plantas coquizadoras en las refinerías de Tula y Salina Cruz que reduzcan la producción de combustóleo, un residuo altamente contaminante con el que la empresa pierde dinero.
El CEO de Pemex, Octavio Romero Oropeza, dijo a Bloomberg Línea que las obras enfrentan retrasos y estarán listas hasta 2024 y no en 2023 como planeó López Obrador como parte de su política de autosuficiencia en combustibles.
El negocio de refinación es el único que registra pérdidas para Pemex en un mercado internacional de altos precios del petróleo.