Buenos Aires — Como en cualquier mercado de oferta y demanda, el precio de las propiedades en Argentina está atado a que haya, o no, compradores dispuestos y con posibilidades de pagar. En un país prácticamente sin oferta de crédito hipotecario, por ello que las dificultades que tienen las familias para acumular el dinero necesario para adquirir un departamento o una casa hace que las propiedades estén en cotizaciones bajas en términos históricos.
“Las propiedades vienen en baja desde hace cuatro años y a principios de 2022 tocaron un piso”, consignó Ariel Champanier, CEO de RE/MAX Premium.
Según distintos análisis a los que hace referencia un informe de RE/MAX, el descuento de los valores este año osciló en el 5% en propiedades que ya estaban en valor de mercado durante 2022 y se estima que la baja total de los precios desde fin de 2019 a la fecha ya superó el 35%. A eso se suma que el descenso del valor del metro cuadrado ya llega al 40%.
Qué tiene que pasar para que suba el precio de las propiedades en Argentina
“Hasta que no haya créditos hipotecarios y la gente no tenga capacidad de ahorro, los precios no van a volver a subir”, aseguró Charpentier. El ejecutivo, incluso, pronosticó que el 2023 “estará marcado por la estabilización de valores y la reactivación del mercado inmobiliario”.
Desde RE/MAX indicaron que, debido al sobre stock y la falta de ventas, la oferta inmobiliaria está en sus máximos históricos y hoy se consiguen, por ejemplo, monoambientes desde US$55 mil, unidades de dos ambientes que arrancan en US$65 mil y departamentos de 3 ambientes a partir de US$85 mil, cuyas cotizaciones varían de acuerdo a la antigüedad, amenities y metraje.
Monoambientes, los que más ajustaron
El CEO de RE/MAX Premium detalló que “los monoambientes fueron los que más ajustaron sus precios por ser un segmento donde hay mayor stock”.
Además, de acuerdo a su visión, “los departamentos usados tuvieron que ajustar sus precios porque la gente necesita del dólar billete para comprarlos, mientras que en los emprendimientos desde pozo se puede acceder a una unidad similar por el mismo precio y en cuotas”.
De hecho, entre los valores de publicación de las viviendas que se comercializan y lo que realmente se termina acordando entre oferta y demanda hay una brecha de hasta el 9%.
Pueden crecer las ventas
Para 2023, Champanier pronostica que los compradores seguirán interviniendo en el precio final de las propiedades ya que son los que tienen el dinero y ponen las condiciones para concretar la operación. Frente a este escenario, proyecta que las ventas crecerán un 15% este año.
No hay crédito
“Hoy las entidades tienen poca demanda de crédito privado y su más importante negocio es tomar depósitos y prestarle ese dinero al Banco Central o comprar títulos del Tesoro”, describe un informe reciente de la consultora Econviews.
