Bloomberg — La Reserva Federal elevó sus tasas de interés en 25 puntos básicos este miércoles, dejándolas en un rango de entre 4,5 y 4,75%, reduciendo el ritmo luego del aumento de medio punto y cuatro aumentos de 75 puntos básicos antes de ello.
La decisión, que fue unánime, está en línea con lo que esperaban los mercados y luego de sucesivos datos que muestran que la campaña de endurecimiento monetario está logrando aplacar la inflación.
Los funcionarios de la Fed proyectaron en diciembre que harían una pausa cuando las tasas se movieran por encima del 5%, pero los operadores de Wall Street apuestan a que se detendrán ligeramente por debajo de ese nivel.
Las acciones se mantienen a la baja después del anuncio. El Nasdaq caía un 0,40% y el S&P 500 un 0,52% a las 2:03 p.m., hora del este de EE.UU. El primer índice rebotó minutos después y se mueve al alza, mientras que el segundo continúa en rojo.
“El comité anticipa que serán apropiados aumentos continuos en el rango objetivo para llegar a una política monetaria que sea lo suficientemente restrictiva para devolver la inflación al 2% con el tiempo”, dijo la Fed en una declaración tras la reunión, repitiendo lenguaje que ya ha utilizado previamente.
En lo que podría ser una señal de que el ciclo de endurecimiento se está acercando a su fin, el Comité dijo que la “magnitud de los aumentos futuros” de tasas dependerá de una serie de factores, entre ellos endurecimiento acumulativo de la política monetaria. Antes había vinculado el “ritmo” de los aumentos a los factores.
En lo que representa otro cambio con respecto a su declaración anterior, la Fed notó que la inflación “está algo menor pero sigue elevada”, lo que insinúa que los formuladores de políticas tienen más confianza en que las presiones sobre los precios han tocado un máximo.
En su reunión anterior, celebrada en diciembre, 17 de los 19 responsables de política monetaria pronosticaron que subirían las tasas al 5% o más este año, y ninguno de ellos preveía recortes. El miércoles no se publicaron nuevas previsiones.
El mes pasado, algunos funcionarios de la Reserva Federal se mostraron más esperanzados de poder lograr un aterrizaje suave de la mayor economía del mundo, reduciendo la inflación sin que EE.UU. entre en recesión. Los funcionarios de la Casa Blanca y el Fondo Monetario Internacional también se muestran más optimistas.
Sin embargo, la mayoría de los economistas privados no creen que la Reserva Federal pueda salir adelante sin empujar a EE.UU. a una recesión. Los expertos encuestados por Bloomberg en enero situaban la probabilidad de una contracción durante el próximo año en el 65%.
Tras descartar inicialmente la subida de los precios por considerarla temporal, los responsables de la política monetaria de la Reserva Federal se han apresurado a controlar la inflación galopante antes de que se arraigue en la economía, elevando las tasas bruscamente desde niveles próximos a cero hace tan sólo un año.
También están reduciendo el balance de la Reserva Federal a un ritmo récord, retirando cientos de miles de millones de dólares del sistema financiero.
Las repetidas subidas de tasas han pasado factura a la economía estadounidense. El mercado inmobiliario, afectado por la fuerte subida de las tasas hipotecarias, se ha desplomado y las ventas de viviendas nuevas cayeron en 2022 a su nivel más bajo en cuatro años.
El sector manufacturero también ha caído, afectado por la ralentización de la economía mundial y el desplazamiento del gasto de los consumidores de los bienes a los servicios. La producción industrial lleva tres meses consecutivos cayendo.
Sin embargo, el gasto de los consumidores, baluarte de la economía, ha resistido en general a una inflación desorbitada, ya que los hogares han recurrido a los ahorros acumulados durante la pandemia y han visto aumentar sus ingresos gracias a un vibrante mercado laboral.
Pero a finales de 2022 se observaron signos de debilitamiento. Ajustado a la evolución de los precios, el gasto personal cayó un 0,3% en diciembre, con un estancamiento de los gastos en servicios, el primer mes sin aumento desde enero de 2022.
--Con la colaboración de Kate Davidson y Chris Middleton.
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