Bloomberg Línea — Los presidentes de Brasil y Argentina, Luiz Inácio Lula da Silva y Alberto Fernández, respectivamente, reconocieron previo a la cumbre de la CELAC que ambos países vienen trabajando en la posibilidad de desarrollar una moneda común sudamericana, que pueda usarse tanto para los flujos financieros como comerciales, con el objetivo declarado de “reducir los costos operativos y la vulnerabilidad externa”.
Este sería el segundo intento del siglo de desarrollar una unidad monetaria para intercambio comercial.
El 27 de enero de 2010 había entrado en vigencia el Sistema Unitario de Compensación Regional (SUCRE), una moneda que nació con impulso del ya fallecido expresidente venezolano Hugo Chávez y fue adoptada por la propia Venezuela, Bolivia, Cuba, Ecuador y Nicaragua.
La intención originaria del SUCRE era crear una unidad virtual que reemplazara al dólar en el intercambio comercial entre los países antes mencionados y otras naciones caribeñas que forman parte de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA). En 2013 Uruguay pidió ser incorporado, pero finalmente nunca utilizó esta moneda.
Sin embargo, actualmente esta moneda atraviesa un ocaso y señalamientos por supuesta corrupción. En la práctica, el SUCRE está en desuso.
El ocaso del SUCRE
Según un reporte del Banco Central del Ecuador, publicado en 2017, en tierras ecuatorianas el SUCRE alcanzó su máximo esplendor en 2012, cuando se lo utilizó para 2077 transferencias (2.064 recibidas y 13 realizadas), por un total de US$ 910,38 millones. Desde allí comenzó a decaer su uso, hasta que en 2016 se lo utilizó solo para 373 transferencias en el Ecuador.
Según un artículo publicado en el diario Expreso, del Ecuador, el SUCRE dejó de ser usado con el desplome del precio del petróleo y la desarticulación de los bloques regionales, integrados por países cuya corriente política era el denominado socialismo del siglo XXI. Por ejemplo, Ecuador salió de la ALBA en 2018.
Irregularidades con utilización del SUCRE
Según un informe de la Fiscalía General del Estado de Ecuador, entre diciembre del 2012 y marzo del 2013, la empresa Fondo Global de Construcciones S.A. (Flogocons) habría lavado US$ 159,9 millones en el sistema financiero legal del Ecuador.
Esta empresa se había constituido en el país el 17 de octubre del 2012 y en tres meses movió millones de dólares por exportaciones de planchas prefabricadas, materiales y acabados de construcción de viviendas a Venezuela. Estas operaciones comerciales comenzaron a ser investigadas en junio del 2013 por la Fiscalía General del Estado bajo la presunción de lavado de activos.
Según la fiscalía, Foglocons vendió US$ 159,9 millones en productos prefabricados a ELM IMPORT S.A. de Venezuela. Sin embargo, registró pagos por US$ 200.000 a sus proveedores por estos materiales.
Los productos tampoco habrían sido enviados a Venezuela, pero el dinero por el producto sí llegó a Ecuador a través del Sistema Unitario de Compensación Regional (SUCRE). El Banco Central del Ecuador reportó 185 transferencias millonarias realizadas desde el 28 de diciembre del 2012 al 26 de marzo del 2013.
Estos pagos se hicieron a través del SUCRE desde el Banco Central de Venezuela a su similar en Ecuador y desde allí se acreditaron a las cuentas de Foglocons en dos bancos ecuatorianos.
Actualmente el caso se sigue ventilando en la justicia y en la Asamblea Nacional, donde se han determinado algunas responsabilidades al respecto.
