Bloomberg Línea — El Fondo Monetario Internacional (FMI) prevé que la economía nicaragüense se modere a 3% en 2023, debido sobre todo a la desaceleración mundial y a que la inflación disminuya dado un menor crecimiento.
En un comunicado luego de que el directorio ejecutivo del FMI concluyera la Consulta del Artículo IV con Nicaragua correspondiente a 2022 se lee que “las políticas macroeconómicas prudentes, las importantes reservas previas a la crisis y la asistencia financiera externa ayudaron a la economía a recuperarse de una prolongada contracción en 2018-2020″.
El Producto Interno Bruto (PIB) real creció 10,3% en 2021 y se proyecta que en 2022 habrá crecido 4%, gracias a la demanda externa, las remesas y los altos precios de las exportaciones de materias primas.
Las reservas internacionales brutas se han duplicado desde finales de 2018 a más de US$ 4.000 millones, o el equivalente a seis meses de importaciones, excluyendo la maquila. Los depósitos bancarios están aumentando y han retornado los niveles observados antes de la crisis (en córdobas).
A mediano plazo, el FMI prevé que el PIB real crezca aproximadamente 3,5%, es decir, por debajo de la media histórica previa a la crisis, conforme el crédito al sector privado y la inversión privada se recuperan cautelosamente.
“Estas perspectivas favorables están sujetas a incertidumbre y a riesgos a la baja, relacionados primordialmente con la evolución externa, desastres naturales o un deterioro del clima de negocios y el endurecimiento de las sanciones internacionales”, dijo el multilateral.
Recomendaciones del FMI
Por medio de la Consulta del Artículo IV, funcionarios del FMI que visitaron Nicaragua para recopilar y analizar las políticas macroeconómicas y la situación financiera, señalaron la sólida recuperación económica y las perspectivas favorables.
Los directores elogiaron el compromiso de las autoridades de seguir adoptando políticas prudentes para reforzar los márgenes de maniobra para la aplicación de políticas, el crecimiento económico y la resiliencia, en vista de los riesgos a la baja y las vulnerabilidades a desastres naturales.
Sin embargo, insistieron en la necesidad de redoblar esfuerzos para mejorar el clima empresarial, la transparencia y el marco de gobernanza. Al respecto, los directores hicieron un llamado a reforzar la consolidación fiscal a mediano plazo con el fin de salvaguardar la sostenibilidad fiscal y la estabilidad externa.
A tales efectos sería necesario simplificar otros gastos corrientes, focalizar mejor los subsidios y replegar las medidas de gasto relacionadas con la crisis, mientras manteniendo un gasto social adecuado y reduciendo la pobreza, abordando los desequilibrios en el sistema de seguridad social y las empresas del Estado y reforzando la movilización interna de ingresos.
Los directores destacaron la necesidad de seguir incrementando la tasa de interés de referencia a fin de preservar el diferencial de tasas de interés con Estados Unidos, en concordancia con el régimen de tipo de cambio móvil y la estabilidad financiera y externa.
En el sector financiero
El FMI elogió la solidez de las reservas de capital y de liquidez del sector bancario y recomendaron seguir apuntalando el sector financiero, lo que conlleva incrementar las provisiones para activos en dificultades, preservar las prácticas sólidas de financiación conforme se reactiva el crédito, reforzar el marco de preparación ante crisis y ampliar el perímetro de supervisión prudencial.
Los directores celebraron las mejoras en el marco de lucha contra el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo (ALD/LFT) y la reciente salida de Nicaragua de la lista gris del Grupo de Acción Financiera (GAFI). También, alentaron a las autoridades a reforzar aún más la eficacia del marco, incluido el sector sin fines de lucro.
El organismo consideró acertadas las medidas adoptadas recientemente para incrementar la transparencia fiscal y felicitó a las autoridades por la publicación del primer informe sobre riesgos fiscales y el primer examen de auditoría externa sobre el uso de los fondos destinados a la Covid-19. Además, alentaron a las autoridades a hacer públicos todos los informes de auditoría y estados financieros de las empresas del Estado.
Los directores tomaron nota de las medidas adoptadas para fortalecer los marcos de gestión de gobierno y lucha contra la corrupción, pero destacaron la necesidad de llevar a cabo más esfuerzos para subsanar las deficiencias pendientes.
También hicieron hincapié en la necesidad de afianzar el régimen de declaración de activos de los funcionarios públicos y de dar prioridad a los exámenes de personas expuestas políticamente para contribuir a los esfuerzos de lucha contra la corrupción.
El FMI recomendó, asimismo, garantizar la protección de los denunciantes, el acceso equitativo e imparcial al sistema judicial y a recursos en los procesos jurídicos, a fin de respaldar los derechos de propiedad, el cumplimiento de los contratos y la protección de las inversiones.