Algunas empresas británicas han comenzado a pagar una prima a los empleados que acudan a la oficina cinco veces por semana, según la mayor agencia de reclutamiento del país.
James Reed, presidente del gigante de reclutamiento homónimo, dijo que los empleadores están aumentando los sueldos en la mayoría de las industrias, entre ellas hospitalidad, sanidad y manufacturas, que tienen menos flexibilidad para el trabajo remoto.
“Los salarios de los trabajadores que tienen que asistir físicamente al lugar de trabajo cinco o más días a la semana han subido bastante”, dijo Reed en una entrevista. “Los empresarios están teniendo que pagar más para que lo hagan”.
Las declaraciones subrayan la dificultad que tienen los empresarios para encontrar y mantener personal después de que al menos 600.000 personas abandonaran la población activa durante la pandemia. Los salarios están aumentando a un ritmo casi récord porque escasean los trabajadores, a pesar de que la economía se encamina hacia la recesión.
La decisión de Gran Bretaña de abandonar la Unión Europea y la pandemia exacerbaron esas tendencias al reducir la inmigración que solía cubrir muchos puestos de trabajo poco cualificados y crear la expectativa de que muchos oficinistas pueden trabajar desde casa la mayor parte del tiempo.
El problema es más grave en el Servicio Nacional de Salud, la hostelería y la restauración, donde los salarios han ido históricamente a la zaga de otros sectores y los trabajadores no pueden hacer su trabajo a distancia.
Mientras que el salario general ha subido un 6,8% interanual en las ofertas de empleo del sitio web de Reed, se ha disparado un 12,9% en sanidad y medicina, un 10,6% en hostelería y restauración y un 14,6% en el sector manufacturero, ya que la oferta de trabajo híbrido tienta a los solicitantes de otros sectores.
El descenso de la población activa británica significa que los solicitantes de empleo pueden pedir más flexibilidad y prestaciones. Por primera vez en décadas, el poder de la economía se desplaza del capital al trabajo.
Los salarios aumentan rápidamente, alcanzando el 7,2% en el sector privado en los tres meses hasta noviembre, si se excluyen las primas. Al margen de la pandemia, se trata del mayor aumento registrado hasta la fecha y ha animado a los trabajadores a plantear demandas cada vez más extravagantes.
“No se trata sólo de dinero”, afirma Liz Martins, economista británica de HSBC Bank Plc. “Se trata también de otras exigencias en torno a la flexibilidad y ese tipo de cosas. Uno de nuestros clientes nos dijo que un candidato le había pedido un día de edredón al mes, además de sus vacaciones anuales. Se reían de ello, así que quizá el candidato no tuvo éxito, pero en este mercado laboral realmente no se sabe”.
-- Con la ayuda de Andrew Atkinson.
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