Bogotá — Hace unos días el Dane informó que las importaciones de Colombia fueron US$6.043 millones en noviembre de 2022, una disminución de 7,7% con relación al mismo mes de 2021 (US$6.545 millones). Aunque el nivel completó nueves meses consecutivos por encima de los US$6.000 millones, la contracción anual es la mayor en casi dos años.
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De acuerdo con expertos consultados por Bloomberg Línea, entre las razones de la desaceleración de las compras externas de Colombia en el penúltimo mes de 2022, las más profundas en 21 meses, está un menor consumo local dada la desaceleración económica que se acentuó desde el segundo semestre del año pasado, comentó María Paula González, analista de investigaciones económicas de Corficolombiana.
Sin embargo, González agregó que la caída de las importaciones “es positivo en el sentido de que da señales de que la economía colombiana está desacelerando su crecimiento, en un contexto en el que el país viene creciendo por encima del potencial. Además, una caída de las importaciones se traduce en un menor déficit comercial”.
Por su parte, Gustavo Acero, economista senior del equipo económico del Banco de Bogotá, comentó que la contracción de las importaciones “se debe más a un efecto de base estadística, que empieza a jugar en contra pese a que se mantienen en niveles altos en monto”.
Acero agregó que “la pérdida de tracción de las importaciones podría impactar la inversión, por el componente de bienes intermedios y de maquinaria, que cuentan con un porcentaje altamente importado”.
De acuerdo con los expertos de investigaciones económicas del Banco de Bogotá, “la elevada base de comparación comienza a jugarle en contra de las importaciones, aunque el nivel de estas sigue siendo elevado, lo que sigue generando presión en la balanza comercial y, en medio del repunte rezagado de las exportaciones, limitan la corrección del déficit”.
Sobre la balanza comercial, los analistas del banco dijeron que “el déficit en noviembre fue US$1.115 millones, completando cuatro meses consecutivos por encima de la barrera de US$1.000 millones. Si bien sigue elevado, corrigió frente al año anterior cuando sumó más de US$1.800 millones y el acumulado 12 meses bajó desde US$15.300 millones a niveles cercanos a US$14.500 millones”.
Los expertos agregaron que el balance de las cuentas externas al cierre del año, al menos desde la balanza comercial, sugiere dos puntos: “1) es positivo que el deterioro de la balanza comercial se pausó, luego de tocar máximos históricos en el primer semestre; 2) es preocupante y negativo los niveles elevados que siguen presentándose, más allá de la corrección, pues el deterioro también podría estar empezando a mostrar signos de estancamiento”.
