Bloomberg — La participación del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, en la CELAC, a menos de un mes de tomar posesión de su cargo, ilustra el esfuerzo de Brasil para retomar un rol de liderazgo en la región.
“Es con gran alegría y satisfacción muy especial que Brasil está de vuelta en la región y listo para trabajar codo a codo con todos ustedes, con un sentido muy fuerte de solidaridad y cercanía”, dijo Lula el martes en una cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños.
El grupo de 33 países fue fundado en 2010 para reemplazar a la OEA y contrarrestar la influencia de EE.UU. en la región. Brasil dejó la CELAC en 2020 durante la presidencia de Jair Bolsonaro, en las antípodas ideológicas de Cuba y Venezuela.
El regreso del país a la organización de la mano de Lula tres años después se celebró en una declaración conjunta al final de la reunión. El documento reafirmó el compromiso del grupo con la democracia y exigió que los bancos regionales y las organizaciones multilaterales de desarrollo mejoren el acceso al crédito para los países que salieron de Covid con mayores niveles de deuda pública.
Tensiones ideológicas
La cumbre también sirvió de foro para que los países miembros estrecharan lazos diplomáticos y comerciales en toda la región.
“Hemos adoptado una declaración muy buena, completa y exhaustiva sobre una amplia gama de retos a los que nos enfrentamos”, declaró Ralph Gonsalves, Primer Ministro de San Vicente y las Granadinas, la pequeña nación insular caribeña elegida para asumir la presidencia pro tempore de la CELAC en 2023.
Aun así, las diferencias ideológicas siguieron siendo una fuente de tensión en la región, y el Presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, criticó a los miembros de la CELAC que no respetan la democracia y los derechos humanos y advirtió de que la organización corre el riesgo de convertirse en un “club de amigos ideológicos.”
Uruguay ha estado chocando con sus socios del bloque comercial Mercosur mientras intenta avanzar en las conversaciones comerciales bilaterales con China.
“Estamos en condiciones de negociar bilateralmente con China”, dijo Lacalle Pou en la cumbre de la CELAC. “Si es con Mercosur, aún mejor”.
Celso Amorim, asesor especial de Lula, dijo que Brasil respeta las demandas de Uruguay pero quiere preservar el Mercosur.
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