Ciudad de México — El dólar en México presenta movimientos volátiles tras haber registrado esta semana niveles mínimos de MXN$18,50 por unidad, observados anteriormente en febrero de 2020. No solo los inversionistas se mantienen pendientes de los movimientos del peso mexicano, también es un dato seguido por las empresas.
La apreciación del peso mexicano es una señal positiva para el país ya que no solo demuestra que diversos factores locales e internacionales están respaldando a la moneda, analistas han apuntado a que la apreciación puede ayudar a disminuir el monto de deuda del país en moneda extranjera; incluso puede contribuir a reducir presiones inflacionarias.
Sin embargo, puede ser una mala noticia para las empresas productoras de bienes que son exportados como el petróleo o los automóviles; incluso las compañías dedicadas a agregar valor en la cadena productiva de un bien nacional.
Por otro lado, la depreciación del peso mexicano afecta a las compañías que dependen de componentes importados ya que tiende a aumentar el costo de los insumos, de acuerdo con un reporte de Banco Base.
¿Cómo minimizar impactos por los movimientos cambiarios?
El mercado cuenta con diversos instrumentos que ayudan a mitigar las pérdidas ante los movimientos volátiles del peso mexicano frente al dólar. Las empresas pueden adquirir coberturas cambiarias y, con ello, mitigar las pérdidas que pudieran afectarlas.
Entre el 30 de diciembre de 2022 y el 17 de enero de este año, el peso mexicano acumulaba una apreciación de 4,5% y cotizaba en MXN$18,6611 por unidad.
Un día después, el 18 de enero, la moneda local comenzó a aumentar la volatilidad ante la incertidumbre de los inversionistas sobre una posible recesión económica, presionando el peso mexicano y regresándolo a niveles de MXN$18,9924 por billete verde.
El tipo de cambio es una variable expuesta a diversos factores que pueden alterar su desempeño en cuestión de segundos.
“No hay espacio para la especulación”, dijo a Bloomberg Línea la líder comercial en Banco Base, Cristina Rovelo. “El punto de partida, para no caer en especulación, es que realmente exista una exposición cambiaria”.
¿En qué y a quiénes beneficia que el precio del dólar baje?
Rovelo explicó que existen empresas que no tienen ingresos o gastos en dólares y tienden a comprar posiciones, situación que es definida como especulación, ya que buscan generar un ingreso adicional con un contraste a los ingresos. “Nos hemos llegado a topar con empresas que están dispuestas a correr ese riesgo”.
Las empresas deben realizar un análisis con base a los ingresos que tienen y los que proyectan recibir, para decidir la cantidad que se desea adquirir de cobertura, misma que puede empezar desde los US$20.000, mencionó Rovelo. “Es importante que definan cómo están costeando y proyectando sus ingresos”.
En México, empresas como el productor de harina de maíz Gruma (GRUMAB) y la panificadora Grupo Bimbo (BIMBOA) suelen tomar coberturas ante la exposición que tienen a las materias primas como el maíz y el trigo; además de ser exportadoras.
“Las empresas que tienen que ver con los forrajes o granos tienden a ser más sofisticadas porque al final tienen una sensibilidad de cómo el precio de los granos puede impactar”, dijo Rovelo.
Rovelo explicó que las compañías cuyos ingresos o gastos se encuentren en otras monedas pueden adquirir instrumentos derivados con la finalidad de fijar un tipo de cambio para una fecha futura misma que puede rondar en cinco, 28 días o un año.
“El mayor reto es con las empresas exportadoras”, mencionó Rovelo. Hasta hace algunos años se sugería que el dólar siempre tiende al alza y, “como exportador ¿para qué me cubro si siempre va para arriba?”.
La especialista mencionó que, a través de un análisis realizado en Banco Base, se observó que siete de cada 10 operaciones de sus clientes que venden dólares, fueron mejor valuadas que el mercado. “No puedes recargar el crecimiento de tu empresa en una variable externa como lo es el tipo de cambio”, dijo.
Las empresas no solo se deben proteger ante las depreciaciones del peso mexicano, también de las apreciaciones con la finalidad de asegurar sus márgenes de rentabilidad en el futuro o incluso disminuir las pérdidas que pudieran tener sin las coberturas.
Entre los instrumentos disponibles en el mercado existe el window forward que permite pactar cierta cantidad de dólares a un tiempo determinado, a esa fecha se le conoce como ventana. Durante esa ventana de tiempo se podrá disponer de manera parcial o total de los dólares sin costo adicional.
No hay porcentajes a cubrir, pero es protegerse de la exposición cambiaria donde se pide pactar una parte del compromiso para familiarizarse con el instrumento y determinar qué tanto quiere protegerse.
“Por ejemplo, en una licitación. Sabemos que se debe enviar la mejor propuesta, pero es difícil saber cuál es el tipo de cambio y tener que decir ‘te tengo que ajustar’, entonces al final lleva una cobertura de 100% para tener que trabajar de gratis por una depreciación”, mencionó.
Cada empresa tiene un modo de operación distinto. Por ello, es importante crear un ‘traje a la medida’, esto es los requerimientos de la empresa que suelen ser determinados por un especialista en derivados.
Esta historia se corrigió en el nombre de la especialista en Banco Base.