Bogotá — Hace unos días el Gobierno dijo que no subirían las tarifas de los peajes en el país, con el fin de intentar contener la inflación histórica que enfrenta Colombia. El decreto que así lo ordena, se firmó el 15 de enero, pero se conoció públicamente un día después, lo que dio paso a que varias concesiones aumentaran los precios.
Pese a lo anterior, el presidente Gustavo Petro dijo a través de su cuenta de Twitter que “las concesiones que eleven tarifas de peaje sin autorización del Gobierno serán sancionadas por la superintendencia”.
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Más allá del contexto expuesto, el presidente Petro resaltó que no subir los precios del peaje y congelar el precio del diesel, “no habrá incrementos de costos de transporte de carga y alimentos este año. Es una medida antinflacionaria estructural”.
¿Congelar precios son medias estructurales contra la inflación?
Pese a las afirmaciones del presidente Petro, varios expertos dicen que si bien dichas medidas pueden tener cierto efecto en la inflación, que ya supera el 13% anual, estas no son una medida antinflacionaria estructural.
De acuerdo con la economista María del Pilar López, “el congelamiento del precio del diesel y de peajes no son medidas antinflacionarias estructurales. Estas medidas tendrán que ser compensadas por otro lado (menos gasto o más déficit) y no son sostenibles en el mediano plazo sin tener consecuencias negativas”.
Según el Gobierno, los recursos que se dejan de recibir por el no incremento en las tarifas de los peajes representan alrededor de $600.000 millones anuales, recursos que saldrán de la adición presupuestal para este año que se tramitará una vez inicien las sesiones en el Congreso de la República.
No obstante, dichas estimaciones serían inferiores a lo que estiman expertos del sector. Según una fuente que prefirió no ser citada, no subir la tarifa de los peajes este año afecta todo el modelo financiero a futuro y el costo fiscal podría superar los $10 billones.
Si el costo fiscal de no subir las tarifas es el estimado por el Gobierno ($600.000 millones), aunque no sería mucho en términos del Presupuesto General de la Nación, “empieza a dar señales de en qué se estaría gastando el recaudo de la reforma tributaria”, dijo Sergio Olarte, economista principal de Scotiabank Colpatria.
Respecto al ACPM, Olarte mencionó que “si bien ya se conoce que se está disminuyendo el déficit del Fondo de Estabilización de los Precios de los Combustibles, esos siguen siendo unos recursos que de todas maneras hay que pagarles a Ecopetrol, no solo por el ACPM, también por la gasolina, por los que hay pagar por lo menos $20 billones este año”.
Para el experto de Scotiabank, las medidas anunciadas por el presidente Petro para bajar la inflación, que en este momento está demasiado alta, no son estructurales, “porque de todas maneras eventualmente tendrá que volver a subir el ACPM e incluso los peajes el próximo año. No significa un cambio en la estructura de costos de fletes y del transporte en Colombia”.
Sin embargo, explicó Olarte, “en el margen si debe ayudar a que por lo menos, durante este año, los costos de transporte disminuyan un poco, habrá que ver que tanto porque los costos de transporte son más que fletes y ACPM, son los salarios que subieron, los repuestos que han venido subiendo de manera importante, la afectación de las vías por el invierno; lo que hace que pueda seguir siendo más costoso; por esto mismo es difícil de calcular cuánto puede ayudar a la inflación”.
¿Las medidas anunciadas prolongarán la inflación alta?
“Este tipo de medidas son temporales y no necesariamente van a hacer que la inflación se demore más en bajar o en llegar a su pico, lo que puede hacer es que la desaceleración de la inflación sea más lenta, es posible que empiece a bajar, pero se va a tener inflación en promedio de 11% durante todo el año y solo en los últimos 2 o 3 meses del año se tendría una inflación a un dígito, lejana del 3%”, resaltó Olarte al agregar que la inflación del 3% se vería en 2025.
“Esta medida logra qué temporalmente se pueda prever que ya tocó techo la inflación, pero no que haga que se demore más o menos en llegar a la meta, simplemente porque hay unos efectos muy constantes y fuertes en los precios internacionales y locales que están haciendo que la inflación se demore en caer”, añadió el experto de Scotiabank.