Buenos Aires — “Muchachos, ahora nos volvimos a ilusionar”. La canción emblema del Mundial Catar 2022 bien podría reflejar el ánimo de los inversores argentinos de renta variable, quienes, luego de sufrir la mayor segunda mayor caída bursátil de la historia global tras las elecciones primarias de 2019 y tras tres años con avances intermitentes y retrocesos, ven al S&P Merval dispararse sin freno.
El índice bursátil porteño medido al dólar contado con liqui (CCL) de acciones cerró el viernes 13 de enero apenas tres puntos por debajo de los 700 puntos. Y los inversores que hoy se ilusionan no se olvidan que que hacia finales de julio del año pasado el Merval pululaba en torno a los 350 puntos, lo que implica que en poco tiempo duplicó su valor en moneda dura.
No obstante, al S&P Merval aún le falta un trecho para alcanzar la cotización en dólares que tenía un día antes de las Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) de 2019, cuando se ubicaba en 970 unidades. ¿Hay margen para volver a ese nivel? ¿E incluso sobrepasarlo?
Qué hay detrás del rally del Merval
Un informe de Delphos Investment destaca que, desde junio de 2021 que el EEM (índice de acciones de países emergentes) mantuvo una tendencia negativa que se revirtió en octubre del año pasado, lo que dio pie al rally del Merval. “Desde el piso marcado en dicho mes, el EEM se encuentra un 20% arriba, mientras que el índice argentino logró una overperformance por 29 puntos porcentuales (49% de ganancia en moneda dura)”.
Un análisis similar otorgó el equipo de research de Portfolio Personal Inversiones (PPI), al remarcar que en 2022 las acciones chilenas vienen de trepar 22,3% en dólares, mientras que las de Brasil lo hicieron en 10,4%, mientras que, en ese contexto, el Merval en dólares avanzó 43% el año pasado. “En lo que va de 2023 la tendencia continuó y el Merval lleva un avance del 17% en moneda dura”, sostuvieron.
En ese sentido, Delphos Investment añade que los inversores no parecen preocuparse hoy por los fundamentos futuros, “sino que siguen la corriente global y regional ajustando al beta local”.
Es decir, en primer lugar se podría decir que el Merval se ve empujado por la corriente de los emergentes, pero que crece muy por encima del resto de los mercados. En ese sentido, algunos analistas consideran que los precios estaban sobrecastigados y, por ende, los inversores estarían jugando un “trade electoral”, es decir, apostando porque en 2023 se podría imponer en las elecciones presidenciales una opción política más pro mercado.
Santiago Ruiz Guiñazú, head de equity sales & trading de Adcap Grupo Financiero, afirmó que prefiere no hablar de trade electoral, aunque sostuvo: “Esta nueva situación comenzó con la asunción de Sergio Massa en el Ministerio de Economía y el equipo que armó, ya que en ese momento se lograron desactivar ciertas tensiones en torno a las expectativas económicas, calmando sobre todo al frente cambiario, que es muy importante”.
Hecha esta aclaración, Ruiz Guiñazú explicó que las empresas argentinas tienen valuaciones muy bajas. “Desde el 2018 a hoy, las compañías han sufrido una pérdida de valor sustancial, por lo que creemos que hay una oportunidad si efectivamente la macroeconomía empieza a mejorar”.
Como prueba de ello se puede observar que la acción de YPF a nivel internacional llegó a cotizar US$ 26,27 en enero de 2018 y en julio de 2021 tocó un piso de US$ 2,91. El viernes de 13 de enero finalizó la jornada arriba de los US$ 11, siendo una de las puntas de la lanza del extraordinario rally de las acciones argentinas.
¿Puede seguir el rally?
La gran pregunta que se hace el mercado es si el rally llegó para quedarse y de ello dependerá que siga soplando el viento a favor desde el exterior y, también, que se vayan conociendo encuestas que permitan entrever el futuro político de la Argentina.
Desde PPI explicaron que, si se toman de referencia los precios de los últimos cinco años, el S&P Merval da lugar a un margen de suba potencial de 1,8x, antes de regresar a valores techo de este lustro. “Para retornar a los valores previos a las PASO el salto debería ser del 64%, si ajustamos por la inflación de Estados Unidos”, añadieron.
No obstante, aclararon que pecaría de “optimista” quien crea que las valuaciones de las empresas argentinas puede operar en múltiplos similares a los del resto de América Latina, cuando uno contempla todas las particularidades de Argentina. Por un lado consideraron que es necesario que sopesar el férreo control de cambios doméstico y, por otro, enorme diferencia de riesgo país que hay con los vecinos.
“Muchas firmas argentinas tienen sus balances ajustados por inflación y eso también limita la comparabilidad”, sentenciaron desde PPI.
Por su parte, Ruiz Guiñazú sostuvo que o que necesita la Argentina para salir adelante “es llegar a un acuerdo maduro a nivel político, entendiendo qué cosas se hicieron mal y cuáles bien”. En ese sentido, añadió: “Hablamos de un cambio de ciclo en el que Argentina puede empezar a arreglar los desequilibrios macroeconómicos y hacer que sus empresas operen en un escenario más certero y que esto genere interés en la comunidad inversora”.
No obstante, Ruiz Guiñazú afirmó que Adcap Grupo Financiero viene teniendo, desde hace un año, una mirada “constructiva” y “positiva” respecto del devenir del país.
Un informe reciente de Consultatio Plus destaca que el escenario implícito que está tradeando el mercado es que el Gobierno obtendrá el margen que necesita para administrar la escasez de divisas durante 2023 y trasladar ese tema a la próxima administración, que implementará un enfoque más ortodoxo que redundará en una mayor oferta de dólares futura.
Mientras tanto, Grupo IEB sostiene que la sustentabilidad del trade a favor de Argentina queda supeditada al éxito del programa del Gobierno y a que CFK se mantenga al márgen de una posible candidatura.
Qué sectores recomiendan los especialistas
La primera pregunta que se debe hacer el inversor es si considera que las acciones argentinas seguirán subiendo y la segunda es qué sectores favorecer a la hora de armar un portafolio local.
Al respecto, Grupo IEB destacó:
- “El sector energético continúa siendo nuestro favorito dentro del S&P Merval. Siendo Pampa Energía nuestra acción favorita, ya que consideramos se encuentra retrasada con respecto a sus pares y presenta, todavía, un gran potencial de upside”.
- “Creemos que es un buen momento para incrementar posición en BYMA, por ser una acción que consideramos defensiva -puede hacer un buen pass-through de la inflación y devaluación del tipo de cambio- y su portafolio de US$ 220 millones (CCL) en instrumentos con riesgo muy bajo representa casi el 50% del market cap”.
- “Mantenemos en 10% la exposición al sector bancario, ya que entendemos que sigue siendo un sector riesgoso, pero consideramos que dadas las valuaciones a las que cotizan actualmente los bancos el downside es limitado vs el potencial de upside”.
Desde AdCap Grupo Financiero indicaron:
- “Creemos que en el sector energético, un sector que es estratégico para el mundo, están las mayores oportunidades”.
- “Empresas como YPF, Pampa Energía, Transportadora Gas del Sur y Transportadora Gas del Norte creemos que pueden estar las mayores oportunidades para el mediano plazo”.
- “En cuanto al sector financiero, consideramos que está muy regulado, y que para que se genere una oportunidad es importante que se genere demanda de crédito, y es algo que puede pasar una vez que la economía empiece a crecer de forma más estable, en el orden del 3% o 4%”.
Capital Markets Argentina cuenta con un portfolio sugerido para Argentina con los siguientes ítems:
El ETF argentino también está de rally
El fondo cotizado (ETF) con acciones de origen argentino lleva un salto del 15,6% en esta primera quincena de enero, respecto del cierre de diciembre.
El ARGT, de él hablamos, es un fondo que cotiza en Wall Street y sus tenencias están conformadas por acciones de empresas nacidas en Argentina, aunque no todas están en el Merval.
De hecho, el 19,44% de esta cartera está compuesta por Mercado Libre, que solo se puede comprar en la Bolsa porteña a través de Cedears