Disturbios en Brasilia: ¿qué piensa el mercado financiero de Brasil al respecto?

Analistas consideran que, aunque los riesgos más inmediatos se han contenido, todavia existen amenazas a largo plazo

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Bloomberg Línea — Los ataques a las sedes de los tres poderes de Brasil el domingo generaron una reacción mixta entre los analistas del mercado financiero consultados por Bloomberg Línea el lunes.

La evaluación es que la acción de los manifestantes que abogan por la anulación de los resultados de las elecciones en las que votaron 124,1 millones de brasileños – en la segunda vuelta – exacerbó el clima de polarización e inestabilidad política, lo que aumenta los riesgos para los activos brasileños a mediano y largo plazo.

“El entorno político inestable y profundamente dividido y la elevada tensión social asociada mantienen altas las primas de riesgo y podrían afectar a la gobernabilidad general”, afirmó Alberto Ramos, economista jefe para América Latina de Goldman Sachs (GS).

Sin embargo, a pesar de la gravedad de la situación, las protestas se controlaron el mismo domingo y los riesgos más inmediatos para las acciones de empresas brasileñas se han enfriado.

En los análisis prevaleció la percepción de que el impacto económico debería ser limitado y efímero y que el agravamiento de la situación de riesgo político estaba contenido, al menos por ahora, tras la acción coordinada de los gobiernos y la Justicia para desmovilizar a los manifestantes y llegar hasta los responsables de los disturbios.

Tras abrir en caída en la sesión bursátil del lunes, el Ibovespa (IBOV) comenzó a subir por la tarde y terminó la sesión con una ligera subida del 0,15%, influido por el buen ambiente en las bolsas internacionales y la opinión de que la Reserva Federal, el banco central estadounidense, podría tener que subir menos los tipos de interés. El dólar, que llegó a 5,30 reales durante el día, cerró a 5,26 reales, con alza de un 0,62%. El índice subía más de 1,5% el martes.

“El cambio en el sentimiento del mercado es un reflejo del alivio de los inversores con la dura respuesta del gobierno a los actos golpistas tras la rueda de prensa del ministro de Justicia, Flávio Dino, garantizando el pronto restablecimiento del orden público”, dijo Mariane Vas, analista senior de la plataforma de inversión Gorila.

Además de la reacción de la bolsa, una de las evaluaciones es que el gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva puede acabar beneficiándose de la amplia reacción negativa en los círculos políticos y económicos – dentro y fuera de Brasil – a los atentados de Brasilia, con la posibilidad de ganar apoyo para su agenda económica de reformas. Hubo señales de distanciamiento entre los políticos de la oposición y los actos de violencia el domingo.

“Hay una oposición cada vez más debilitada. Y eso puede acelerar algunas ideas y planes del gobierno de Lula que pueden tener impacto en la economía de Brasil”, afirmó Danielle Lopes, socia y analista de renta variable de la casa de análisis Nord Research.

La dificultad para los activos brasileños en el futuro, sin embargo, será el ambiente de incertidumbre a largo plazo, en medio de una sociedad polarizada, con grupos radicales que tienen como bandera la anulación de elecciones e instituciones, según los expertos.

“El actual gobierno tendrá el enorme reto de caminar durante cuatro años ante una sociedad totalmente dividida. Esto mantendrá un escenario de enorme volatilidad e incertidumbre en el país”, dijo Dan Kawa, CIO de TAG Investimentos, en un comentario.

Lea a continuación las opiniones de los analistas consultados por Bloomberg Línea:

Alberto Ramos, economista jefe para América Latina de Goldman Sachs

“Analistas políticos locales y actores políticos opinan que, a corto plazo, el presidente Lula saldrá reforzado políticamente, dado el carácter violento de los atentados del domingo.

Las elecciones del 30 de octubre fueron una de las más divisivas que se recuerdan. Las violentas manifestaciones atestiguan la profunda polarización social y política previa y posterior a las elecciones.

El entorno político inestable y profundamente dividido y la elevada tensión social asociada mantienen altas las primas de riesgo y podrían afectar a la gobernabilidad general.

Esto implica que el nuevo gobierno, la oposición y la clase política en general tendrán que trabajar para sanar las profundas brechas políticas y sociales abiertas durante la campaña.”

Dan Kawa, CIO de TAG Investimentos

“Los actos de vandalismo, terror y acciones antidemocráticas presenciados en Brasilia traerán consecuencias negativas a corto y largo plazo para Brasil y los mercados locales.

Mi opinión preliminar es que los acontecimientos no favorecen a ninguno de los lados antagónicos de la política. En primer lugar, obliga al STF a tomar medidas aún más duras. Dado que las recientes medidas del Tribunal ya estaban siendo criticadas y muchas de ellas se consideraban jurídicamente cuestionables, unas medidas más duras mantendrán un clima de tensión con el poder judicial.

La izquierda, que cuenta con el apoyo de ‘sólo’ el 50% de la población, continuará con el enorme reto de equilibrarse en este ‘equilibrio inestable’. La derecha, considerada instigadora de estos movimientos (por la población y la justicia), sufrirá las consecuencias jurídicas, penales y políticas del acontecimiento.

A corto plazo, el impacto debe tender a ser limitado, ya que se trata de un ruido más en medio de un entorno que se sabe inestable.

A largo plazo, muestra un país aún dividido, con un alto nivel de insatisfacción de una parte de la población con el Ejecutivo, el Legislativo y el Judicial.

El actual gobierno tendrá el enorme reto de caminar durante cuatro años ante una sociedad totalmente dividida. Esto mantendrá un escenario de enorme volatilidad e incertidumbre en el país.

Los eventos añaden un vector negativo más a un escenario ya difícil para el país y tienden a mantener al alza las primas de riesgo de los activos locales durante más tiempo.

Los Tres Poderes tienen el deber de castigar a los responsables de estos actos de barbarie. Lo que vimos fueron actos de vandalismo. El país no puede, bajo ninguna circunstancia, abrir este tipo de brecha.

Los Tres Poderes también tienen el deber de seguir la Constitución y, una vez terminada la elección presidencial, buscar la unidad del país, con una visión imparcial”.

Mariane Vas, analista senior de Gorilla

“La bolsa brasileña tuvo una sesión muy volátil el lunes. Por la mañana, el Ibovespa cayó un 0,8%, casi perdiendo los 108 mil puntos, y la curva de rendimiento mostró un claro aumento, en medio de la aversión al riesgo de los inversores locales después de los ataques en Brasilia el domingo.

Ya por la tarde el Ibovespa subió un 0,8%, buscando los 110 mil puntos, y los tipos de intereses futuros se volvieron a la baja.

El cambio en el sentimiento del mercado es un reflejo del alivio de los inversores con la dura respuesta del gobierno a los actos golpistas, tras la rueda de prensa del ministro de Justicia, Flávio Dino, garantizando el pronto restablecimiento del orden público”.

Gabriel Gracia, analista de Guide Investimento

“En nuestra opinión, las manifestaciones del 8 de enero deberían tener poca repercusión en el mercado. Los actos vandálicos no fueron espoleados por ningún frente político y no representan un riesgo institucional significativo.

Al parecer, el descontento con el resultado de las elecciones de 2022 (y con todo el proceso electoral) llevó a la manifestación, incluso con ayuda financiera de algunos de sus partidarios.

El mayor impacto político de la manifestación fue la intervención en el Distrito Federal. Según la prensa y el propio presidente Lula, hubo connivencia o inacción de las autoridades del Distrito Federal, que facilitaron la manifestación y la depredación de bienes públicos.

El expresidente Bolsonaro fue mencionado varias veces por Lula y puede quedar más aislado después de este movimiento, pero aparentemente no está directamente vinculado a los eventos.

En la economía, el mayor impacto podría producirse con algún tipo de bloqueo en las refinerías de Petrobras. Sin embargo, hasta ahora se lo ha evitado.

Estos eventps dominarán el mundo político a corto plazo, pero, en nuestra opinión, sin repercusiones en la agenda del gobierno: dado el receso del Congreso, no había ninguna medida relevante en discusión ni en proceso de votación. En resumen, los actos del domingo deben tener un impacto político y económico marginal”.

Ilan Arbetman, analista de investigación de Ativa Investimentos

“En dirección opuesta a los mercados bursátiles mundiales, las acciones brasileñas comenzaron la sesión a la baja, reflejando los acontecimientos del domingo. Como se esperaba, el dólar y los tipos de interés también mostraron una dinámica negativa al inicio de la sesión.

Como hemos comprendido, los acontecimientos acabaron exacerbando la percepción del nivel de riesgo de nuestros activos ante el mercado, y la existencia real de una mayor inestabilidad política contribuyó a empeorar nuestra reputación ante el mundo. Sin embargo, no interfiere en la capacidad de las empresas bursátiles para generar recursos y, por tanto, deberíamos tener un efecto negativo, pero de duración limitada.

Destacamos que, con las particularidades que existen actualmente en mercados emergentes como China, Rusia y Turquía, eventos como el de domingo impiden que el país se reafirme como opción a estos mercados y canalice una mayor gama de recursos externos.

Queda por ver cuánto durará esta sensación de mayor riesgo. Hasta entonces, es posible que destaquen algunos valores exportadores, como hemos visto en la sesión de hoy”.

Danielle Lopes, socia y analista de acciones de Nord Research

“Los actos de la derecha deberían tener un efecto más negativo desde el punto de vista político. Y desde el punto de vista negativo, también fortalece a la izquierda y puede fortalecer toda la agenda que el presidente Lula y sus ministros ya han puesto en la agenda.

El mercado teme más las consecuencias a largo plazo, dado que la agenda podría reforzarse. Hay una oposición cada vez más debilitada. Y eso puede acelerar algunas ideas y planes del gobierno de Lula que pueden tener impacto en la economía de Brasil.

Imaginamos un mayor temor respecto a las agendas que puedan aprobarse durante esta semana, principalmente.

No creemos que esto sea cosa de un día, que vaya a acabar hoy. Creo que esto tendrá repercusiones a lo largo de la semana. Y estaremos atentos a los intereses futuros intereses, que dan una idea de cómo podría quedar Brasil como consecuencia de los planes que se están haciendo mientras ocurren los eventos”.

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