Bloomberg — El líder del partido republicano en la Cámara de Representantes de EE.UU., Kevin McCarthy, volvió a fallar a la hora de conseguir los votos suficientes para ser elegido presidente de la Cámara.
Los oponentes de McCarthy reunieron suficientes votos para negarle la mayoría que necesitaba frente a la oposición demócrata unificada. El grupo de republicanos ultraconservadores le bloqueó en tres rondas de votaciones el martes.
McCarthy y sus aliados consideraron inicialmente un plan para levantar la sesión de la Cámara sin someterlo a votación del presidente para dar más tiempo a las negociaciones, pero no estaba claro si había suficientes votos para seguir adelante.
La Cámara está paralizada hasta la elección del portavoz, lo que ha dividido a los republicanos de la clase dirigente y a una facción de conservadores de línea dura que dicen que McCarthy no ha hecho lo suficiente para ganarse sus votos. No se puede tratar ningún asunto hasta que se decida quién será el presidente de la cámara.
La disputa se ha puesto fea y ambas partes se han lanzado ataques personales. McCarthy, miembro del liderazgo de la Cámara desde hace mucho tiempo, y sus aliados se reunieron a última hora del martes para tratar de resolver el impasse, con poco éxito.
La incapacidad para elegir un portavoz -la primera tarea de un nuevo Congreso- augura dos años difíciles para los republicanos, que tendrán que cooperar para cumplir tareas tan fundamentales como la financiación del Gobierno o el pago de la deuda estadounidense.
McCarthy ha dicho que seguirá intentando negociar y que no renunciará a la presidencia del Congreso. “Si queremos llegar a 218 tenemos que seguir hablando”, dijo el martes por la noche.
El presidente Joe Biden calificó el miércoles la situación de “embarazosa”.
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