Bloomberg — El presidente electo Luiz Inácio Lula da Silva ha nombrado a un senador y exfuncionario de Petrobras para dirigir la petrolera estatal brasileña con miras a convertirla en una potencia de energías renovables.
Jean Paul Prates, senador del Partido de los Trabajadores de Lula, confirmó la invitación en una nota enviada desde su oficina de prensa. Prates se hará cargo de una empresa que ha sido criticada por ofrecer a los inversores dividendos récord, mientras que no ha invertido lo suficiente en refino de petróleo, energía eólica y energía solar.
Incluso el propio Prates ha dicho que la actual dirección de Petrobras está llevando a la empresa “a un precipicio” al centrarse exclusivamente en el petróleo y el gas y descuidar la transición energética.
¿Qué buscará Prates?
Prates es considerado un miembro moderado del izquierdista Partido de los Trabajadores, y su carrera en el Senado le ayudará a gestionar una empresa petrolera sometida periódicamente a presiones políticas para que contenga los precios de los combustibles y cree empleo.
En los últimos años, Petrobras se ha ganado los elogios de los inversores por centrarse en sus proyectos petrolíferos más rentables en aguas profundas del Atlántico Sur, mientras vendía activos de menor margen como oleoductos, refinerías y campos petrolíferos maduros en tierra firme.
Esta estrategia le ha permitido reducir drásticamente su deuda y aumentar el pago de dividendos. A los mercados financieros les preocupa que los beneficios caigan en picado bajo el mandato de Lula, que dirige la empresa para que invierta en otras áreas más acordes con sus políticas industriales más amplias.
“Todas las petroleras se están convirtiendo en empresas energéticas, y no es sólo palabrería”, dijo Prates en una rueda de prensa a principios de mes. “Nada de esto está ocurriendo a la escala adecuada en Petrobras”.
¿Quién es el nuevo jefe de Petrobras?
Prates fue una de las personas clave del equipo de energía de Lula durante la campaña y se encargó de hablar con los inversores sobre petróleo y energía. Trabajó en la división internacional de Petrobras en la década de 1980, luego se convirtió en consultor petrolero y ayudó a redactar la legislación en 1997 que eliminó el monopolio de Petrobras en la exploración.
En una entrevista concedida en agosto, Prates afirmó que, bajo el mandato de Lula, Petrobras revertiría años de recortes de costes y realizaría grandes inversiones en refinería y energías renovables, además de reconstruir las operaciones internacionales que se habían reducido en los últimos años. En un plazo de 30 años, prevé que la empresa invierta tanto en energías limpias como en combustibles fósiles.
También se espera que Lula revise las normas de contenido local, es decir, el porcentaje de bienes y servicios para proyectos petrolíferos que deben proceder de Brasil con el fin de impulsar el empleo nacional. Cualquier aumento de ese porcentaje preocuparía a la industria petrolera, ya que políticas similares han provocado una inflación de los costes en el pasado.
“Tenemos que volver a ser la gran Petrobras que fuimos”, dijo Prates en agosto. “Tiene que transformarse en un actor global de la transición energética”.
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