Buenos Aires — El dólar blue terminó de despertarse en diciembre. Tras permanecer adormecido entre agosto y mediados de noviembre, la divisa que se negocia en el mercado informal volvió a tomar temperatura en las últimas semanas y ya se ubica en niveles de $356, un nuevo máximo nominal histórico.
Si bien el dólar blue no es todavía la cotización más alta del mercado (el dólar Qatar, que abarca a consumos superiores a US$300 por mes en moneda extranjera, se ubica en $365), la reciente suba sí alcanzó para alejar a la divisa que se negocia en el mercado paralelo de las cotizaciones financieras, que permanecen por debajo de los $340. Y esto atenta contra el éxito de una reciente medida dispuesta por el Banco Central de la República Argentina (BCRA).
La escalada del dólar blue
Desde que empezó diciembre el dólar blue acumula un incremento de $42. Pasó de niveles de $314 hasta los $356 en que cerró ayer. Con esta escalada, sobrepasó al dólar MEP, que inició el mes en $ 312,51 y ayer cerró en $334,14.
El hecho de que el dólar blue esté casi $22 más alto que el MEP implica un incentivo para que los turistas extranjeros sigan acudiendo al mercado informal. Al hacerlo, los consumos que realicen en el país tendrán un costo menor en divisas que si utilizaran sus tarjetas de débito o crédito, a pesar de que desde este mes acceden a un tipo de cambio diferencial, más elevado.
Incluso, según distintos reportes de turistas extranjeros, la cotización que están recibiendo cuando realizan consumos en el país es cercana a los $300, por lo que es todavía menor que la cotización del dólar MEP. Según pudo saber Bloomberg Línea, quien se encarga de fijar cada día esa cotización -y de informarla a las operadoras- es la Cámara de Tarjetas de Crédito y Compra (Atatyc), que no respondió de forma inmediata a la consulta de este medio respecto de cómo es que se fija esa cotización.
Si un turista extranjero llegara a la Argentina y cambiara US$100 en el mercado informal recibiría, hoy, unos $35.200 (el dólar blue para la compra cerró ayer en $352). En cambio, si optase por pagar sus consumos con su tarjeta de crédito o débito, por cada dólar recibiría una cotización que hoy ronda los $300.
En caso de hacerlo, entonces, esos mismos US$100 le alcanzarían para abonar consumos por unos $30.000, unos $5.200 menos que si hubiera pagado con efectivo. Dicho de otra manera, una misma cuenta en pesos -por ejemplo, de $10.000- puede significarle al turista extranjero un consumo de US$33,3 si paga con tarjeta o de US$28,4 si lo hace en efectivo.
El incentivo para acudir al mercado informal, lógicamente, se incrementa a medida que es mayor el consumo que realicen.
Incentivos para gastar con tarjetas
Ante la consulta de Bloomberg Línea, desde el Ministerio de Turismo indican que no tienen datos sobre los efectos de la medida en cuanto a la utilización de tarjetas de crédito por parte de turistas extranjeros, aunque sí dicen que está funcionando muy bien y que los turistas que usan VISA y Mastercard están recibiendo el tipo de cambio diferencial.
En el BCRA, en tanto, dicen que no tienen información sobre esas liquidaciones.
Dentro del sector, no obstante, son todavía cautos. Es que hay quienes marcan que, más allá de que los turistas reciben desde este mes un tipo de cambio mejor que el que recibían hasta fines de noviembre, cuando los consumos que realizaban con plásticos se liquidaban al tipo de cambio oficial (hoy en $182,50), todavía hay un largo camino a recorrer en ese terreno.
En primer lugar, apuntan a que para que los turistas extranjeros que llegan al país se acostumbren a pagar con plástico en lugar de hacerlo con efectivo los distintos actores que forman parte del proceso -desde embajadas hasta procesadores de pago- deben conducir diversas campañas de comunicación, que ayuden a que se produzca este cambio cultural.
Por otra parte, desde el sector, señalan que los comercios, hoteles o restaurantes también deben impulsarlo, algo que difícilmente esté sucediendo en la actualidad. Ocurre que, según explican, hoy no parece conveniente para quien tiene un comercio recibir pagos de extranjeros con tarjeta, dado que entre impuestos, retenciones y percepciones pueden perder hasta casi un 10% del consumo. Es ante ese panorama que recuerdan que mientras el turista extranjero no tiene tanto conocimiento de qué le conviene, el que vende tiene incentivos a recibir dólares billete.
Cifras preliminares
Federico Cofman, country manager de Mastercard para Argentina y Uruguay, indica que en la primera semana desde que Mastercard comenzó a otorgar el beneficio de reintegrar la diferencia cambiaria, las operaciones crecieron 25% en monto y 28% en volumen de transacciones.
En Visa, en tanto, manejan cifras similares aunque recuerdan que recién implementaron el tipo de cambio diferencial para turistas extranjeros a mediados del corriente mes.
Por último, y ante la consulta del tipo de cambio diferencial utilizado, Cofman explica que el valor que utilizan para calcular el reintegro es un tipo de cambio alternativo que reciben diariamente por parte de la Cámara, ATACYC. “Se trata de un tipo de cambio más competitivo para los extranjeros, cercano al MEP”, aclara.