China terminará con requisitos de cuarentena por Covid a partir del 8 de enero

La medida incluye a los viajeros que llegan al país, según la Comisión Nacional de Salud

Por

Bloomberg — China terminará con los requisitos de cuarentena relacionados al Covid-19 a partir del 8 de enero. La medida incluye requisitos para los viajeros que llegan al país, según la Comisión Nacional de Salud.

En esta línea, China rebajará las medidas de control a “categoría B”. Actualmente, el país clasifica a la enfermedad como una de categoría B pero la controla como una de “categoría A”.

Además, el South China Morning Post informó que el país podría eliminar los requisitos de cuarentena para los viajeros entre Hong Kong y China continental. Según el medio, se estudia una política conocida como “0+3″, según la cual los viajeros a la China continental ya no tendrían que someterse a cinco días de cuarentena - en su lugar, sólo tendrían que “observar tres días de vigilancia médica”, señaló el medio.

“Muchos están trabajando duro para llegar a una fecha provisional, el 3 de enero”, afirmaba un funcionario de Pekín, en referencia a la fecha prevista para la relajación de los controles fronterizos. El informe se publicó después de que el Jefe del Ejecutivo de Hong Kong, John Lee, declarara el sábado a los medios de comunicación que la ciudad tiene la intención de empezar a reabrir sus fronteras con China continental antes de mediados de enero, con el objetivo de volver a los acuerdos de viaje transfronterizos anteriores a la crisis del Covid-19.

En declaraciones a la prensa a su regreso de un viaje a Pekín, donde se reunió con el presidente Xi Jinping, Lee dijo que su equipo mantendrá conversaciones con los gobiernos de Shenzhen y Guangdong para formular un plan de reapertura de las fronteras, y formará un grupo de trabajo dedicado a este asunto.

Desde finales de noviembre, cuando el descontento con las duras normas de Cero Covid se desbordó y provocó protestas en ciudades de todo el país, las autoridades han desmantelado rápidamente muchas de sus medidas más severas contra la pandemia. La velocidad del cambio ha dejado perplejos a los expertos en salud y a los residentes, que luchan por adaptarse a un nuevo modo de vida que ha visto cómo se disparaban las infecciones y hacía cada vez más irrelevantes las restricciones fronterizas, establecidas para mantener el virus fuera de China.

La segunda economía más grande del mundo ha estado aislada en gran medida desde principios de 2020, cuando China impuso por primera vez una prohibición general a los viajeros al extranjero. Aunque más tarde levantó la restricción total, mantuvo una intrincada red de pruebas y requisitos burocráticos en torno a los vuelos internacionales que desalentaron a la mayoría de los viajeros y efectivamente la mantuvieron sellada del mundo.

Es probable que la mayor facilidad para entrar y salir de China beneficie a los numerosos países de todo el mundo que dependen de los turistas chinos. Y la reciente relajación de los requisitos de aislamiento y pruebas para viajar dentro de China también puede impulsar los ingresos del turismo nacional, que disminuyeron un 26% durante la semana de vacaciones del Día Nacional en octubre, en comparación con el mismo periodo del año pasado.

El brusco giro de China sobre el Cero Covid ha trastocado las expectativas de economistas e inversores, complicando las estimaciones sobre cómo afectarán sus políticas al crecimiento económico.

Si bien es probable que se produzcan importantes vientos en contra a corto plazo a medida que aumenten los casos y los residentes se queden a menudo en casa, lo que interrumpirá una serie de actividades, el cambio de política allana el camino para una recuperación más completa una vez que pase la primera oleada importante de infecciones. China se ha comprometido a reactivar el consumo y apoyar al sector privado en 2023, y los economistas han dicho que las señales son claras en el sentido de que la atención se centra en impulsar el producto interior bruto, y es probable que los responsables políticos se fijen como objetivo un crecimiento del 5% o superior.

Además, la economía del país continuó desacelerándose en diciembre, a medida que la masiva ola de Covid-19 sigue extendiéndose. La actividad está cayendo al tiempo que cada vez más personas se quedan en sus casas para evitar enfermarse o para recuperarse de la enfermedad.

El índice de Bloomberg de ocho indicadores tempranos mostraron una contracción en diciembre, luego de que mostraran ya un ritmo débil en noviembre. Las previsiones son sombrías de cara al año nuevo.

Incluso antes de que se levantaran las restricciones, la economía china atravesaba dificultades, con un desplome cada vez mayor del gasto de los consumidores y el crecimiento más lento de la producción industrial desde los cierres de primavera.

La situación fue incluso peor para los comercios y restaurantes de Pekín que en el conjunto del país, con una caída de las ventas minoristas en la ciudad de casi el 18% en noviembre, al aumentar tanto los casos como las restricciones en la capital.

Lea más en Bloomberg.com