Bloomberg — Tesla Inc. está ofreciendo a los consumidores de Estados Unidos US$ 7.500 de descuento en la compra de sus dos modelos más baratos para entrega antes de fin de año, una medida que probablemente fomentará el debate sobre el alcance de los problemas con la demanda del fabricante de automóviles.
El descuento que Tesla ofrece a los nuevos sedán Model 3 y los vehículos utilitarios deportivos Model Y es el doble de lo que la compañía ofrecía a principios de este mes, y probablemente tenga que ver con los cambios en los créditos fiscales de EE.UU. que entrarán en vigencia en 2023.
Se esperaba que los Tesla fueran elegibles para créditos de US$ 3.750 a partir de enero como parte de los cambios en los incentivos federales para vehículos eléctricos realizado por la ley para la reducción de la inflación.
Eso cambió esta semana cuando el Departamento del Tesoro de EE.UU. anunció que postergaría las directrices sobre cómo cumplir con los nuevos requisitos de contenido de la batería, lo que puede hacer que ciertos consumidores sean elegibles para un crédito de US$ 7.500 a principios del próximo año.
Es muy inusual que Tesla ofrezca tal beneficio, ya que Elon Musk ha hecho cumplir por años una política de no dar descuento. El incentivo es el último indicio de que la predicción del director ejecutivo para un fin de año “épico” no se está cumpliendo. Tesla ha reducido los precios y la producción en China, y Musk ha criticado repetidamente a la Reserva Federal por subir las tasas de interés.
Tesla ya dijo que cree que no alcanzará su objetivo de aumentar las entregas en un 50% este año. La producción del fabricante de automóviles superó las entregas en más de 22.000 vehículos durante el tercer trimestre, y ha preparado a los inversores para que haya otro desajuste al final del año.