Durante 2022, la ciudad boliviana de San Matías, ubicada en el departamento de Santa Cruz y limítrofe con Brasil, ha sufrido un baño de sangre, que se agudizó en los últimos días, cuando sicarios asesinaron a dos personas (un empresario y su asistente) y dejaron a otras dos heridas.
En este contexto, el ministro de Gobierno, Eduardo Del Castillo, atribuyó a extranjeros los crímenes y anunció que la Policía elabora un plan de contingencia para evitar que personas del exterior ingresen al país para cometer delitos.
“Vemos como la República Federativa de Brasil tiene organizaciones criminales que en muchos casos tratan de asentarse dentro del territorio nacional”, indicó el funcionario.
Ante esa situación, Del Castillo sostuvo que las fuerzas de seguridad trabajan con la finalidad de “dar tranquilidad a la población de San Matías”, que vive con temor por los últimos asesinatos registrados.
Las últimas víctimas fatales del doble crimen fueron: José Fernando Blanco (55) y a Roly Santana (38), el primero recibió 10 impactos de bala y el segundo siete.
El crimen habría sido advertido desde Brasil
Un audio difundido por medios de comunicación de cruceños develaron que la Policía boliviana habría sido alertada por sus pares de Brasil acerca de la presencia de sicarios en la población de San Matías.
“Sargento, buen día, todo en la santa paz de Dios. Cinco brasileños y dos bolivianos han ingresado a San Matías para atentar contra personas. Ellos no son de Cáceres, son de más adentro”, se escucha en uno de los audios que supuestamente fue enviado por un policía de Brasil y días atrás.
Según explica el diario Los Tiempos, el mensaje fue gravado por un integrante del Grupo Especial de Frontera (Gefrón) de Brasil, quien señalaba que un grupo de sicarios, entre brasileños y bolivianos, ingresó al territorio para realizar hechos delictivos relacionados al narcotráfico.