Bloomberg — El gobierno de Perú está reabriendo algunos aeropuertos antes de un nuevo intento esta semana por parte del Congreso de aprobar elecciones anticipadas para calmar a los manifestantes y aliviar la crisis política del país.
El aeropuerto de Juliaca, en el sur de Perú, reanudará sus operaciones a partir del lunes, mientras que el aeropuerto de la ciudad de Ayacucho, en el centro sur del país, podría reanudar sus operaciones el martes, dijo el domingo la ministra de Transportes, Paola Lazarte, en un tuit. Se está trabajando para reanudar los vuelos en un tercer aeropuerto en Arequipa, también en el sur, tan “pronto como sea posible”.
Las operaciones en el aeropuerto de la antigua ciudad de Cuzco han vuelto a la normalidad después de que la policía y las fuerzas armadas ayudaran a retomar las instalaciones, dijo el domingo el ministerio de Transporte.
Las protestas continuaron en Perú el domingo, un día después de que la presidenta Dina Boluarte descartara dimitir y reiterara los llamamientos para adelantar las elecciones. Los disturbios se han extendido por el país desde que el ex presidente Pedro Castillo, cuyo mandato de cinco años estaba previsto que finalizara en 2026, fue destituido por los legisladores el 7 de diciembre. Los partidarios de Castillo, que han estado protestando por su destitución, exigen elecciones lo antes posible.
“Aquí vamos a estar firmes hasta que el Congreso resuelva las elecciones anticipadas”, dijo Boluarte el sábado durante una conferencia de prensa con miembros de su gabinete y de las fuerzas armadas.
El Congreso votó el viernes en contra de un intento de adelantar las elecciones a 2023. Horas después, el presidente del Congreso, José Williams, anunció que los legisladores reconsiderarán la propuesta. El Congreso informó en Twitter que reanudará la sesión legislativa el martes a las 10 de la mañana.
Boluarte, el vicepresidente de Castillo que fue investido por el Congreso tras su destitución, primero pidió que las elecciones se adelantaran dos años, hasta 2024, y luego respaldó un calendario aún más rápido a medida que la crisis se intensificaba.
La situación ha provocado bloqueos de carreteras e interrupciones del transporte aéreo y terrestre. El gobierno declaró el miércoles el estado de emergencia en todo el país durante 30 días en un intento de restablecer el orden. Hasta el viernes se había informado de la muerte de al menos 24 personas tras enfrentamientos con la policía, según el Ministerio de Sanidad.
El Secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, pidió a “las instituciones y autoridades civiles de Perú que redoblen sus esfuerzos para llevar a cabo las reformas necesarias y salvaguardar la estabilidad democrática”, según los detalles de una llamada telefónica con Boluarte publicados el domingo. Boluarte insistió en la necesidad de diálogo para aliviar las divisiones.
Una delegación de derechos humanos de la Organización de Estados Americanos anunció una visita a Perú el 20 de diciembre para impulsar “canales de diálogo”.
