Bloomberg — En un estudio de fase intermedia, la vacuna experimental y personalizada contra el cáncer de Moderna Inc. (MRNA) disminuyó el riesgo de recaídas o muerte por un melanoma cuando se combinó con Keytruda, de Merck & Co. (MRK) .
Los dos tratamientos disminuyeron en un 44% el peligro de muerte o reaparición de este cáncer mortal de piel, según indicaron ambas compañías este martes en un documento. Ambas farmacéuticas prevén pasar la mezcla a la última fase de los estudios en el 2023. En la apertura del mercado neoyorquino, las acciones de Moderna ascendían un 13%.
El fármaco Keytruda de Merck, que evita que las células del cáncer esquiven las protecciones del sistema inmunológico contra los tumores, se considera uno de los fundamentos del tratamiento contra el melanoma, ya sea en casos muy avanzados no operables o en la prevención de recurrencias tras la intervención quirúrgica. El estudio de esta vacuna de Moderna tiene por finalidad utilizar una vacuna de ARNm para generar una respuesta del sistema inmunitario mayor que la obtenida con Keytruda en solitario.
Si bien estos resultados brindan la primera evidencia real del efecto beneficioso de una terapia oncológica con ARNm, las conclusiones también señalan “un número limitado de casos o carencia de efecto en un subgrupo de enfermos”, señala el analista de Bloomberg Intelligence, Sam Fazeli.
Los cánceres de piel son, con mucho, los tumores humanos más comunes, y el melanoma, una forma agresiva y difícil de tratar, representa aproximadamente el 1% del total. Aproximadamente 100.000 personas son diagnosticadas anualmente con melanoma, y más de 7.000 de ellas mueren cada año, según la Sociedad Estadounidense del Cáncer.
Para hacer la vacuna, Moderna toma una biopsia de un tumor, aísla algunas de las proteínas y las integra en una vacuna que le enseña al sistema inmunitario a reconocer esos marcadores. Eso ayuda al cuerpo a combatir el cáncer cuando regrese.
Nuevas aplicaciones
Los investigadores han estado trabajando en vacunas personalizadas contra el cáncer durante décadas con un éxito limitado, sobre todo porque son difíciles de fabricar a gran escala. La tecnología de ARN mensajero de Moderna es más flexible que muchas tecnologías más antiguas, lo que hace que las tomas personalizadas únicas en su tipo sean más prácticas de producir.
La compañía ha estado buscando nuevas aplicaciones exitosas para ARNm, lo que facilitó el rápido desarrollo y producción de vacunas contra el Covid-19. Empresas como BioNTech SE (BNTX), socio de Pfizer Inc. (PFE) en la fabricación de vacunas contra el Covid-19, habían estado experimentando con vacunas de ARNm contra el cáncer antes de la pandemia.
Moderna cree que ahora tiene suficientes datos para probar su vacuna en otros tipos de cáncer, dijo el CEO Stéphane Bancel en una entrevista con Bloomberg Television.
“¿Va a funcionar en todas partes? No sé. Pero vamos a intentarlo agresivamente”, dijo, y agregó que Moderna tiene un balance formidable gracias a sus ventas de vacunas Covid-19 y Merck dividirá los costos de desarrollo.
Las acciones de Moderna subieron un 19%, a US$196,45, a las 9:49 a.m. en Nueva York, y las acciones de Merck subieron menos del 1%. Moderna ha caído un 35% este año hasta el lunes. Merck ha subido un 42%.
Con la asistencia de John Lauerman.
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