Aguinaldo, salario anual complementario, décimo tercer sueldo, bono de Navidad... En casi todos los países de América Latina existe algún tipo de retribución para la época de Navidad para los trabajadores formales, aunque en algunos casos es obligatorio y en otros, no.
Ahora bien, ¿qué estrategias pueden implementar los trabajadores para darle un buen destino a ese dinero que, en el caso de algunos países, puede hacer que en diciembre la remuneración de los trabajadores se duplique y en otros que crezca un 50%?
En ese contexto, Bloomberg Línea recogió algunos consejos de la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (CONDUSEF), perteneciente al Gobierno de México, que desarrolló una guía en la cual brinda una serie de consejos acerca de qué destino se le puede dar al plus navideño, para que realmente implique una mejora en el bolsillo del trabajador y no sea malgastado. Estos son algunas de las sugerencias.
Qué hacer con el aguinaldo de Navidad
- Elaborar un presupuesto. El organismo mexicano asegura que tomar tal determinación permitirá conocer la propia capacidad de pago y así establecer un límite en las compras, para evitar comprometer el ingreso futuro.
- Evitar las compras impulsivas. Planear compras con anticipación puede representar un ahorro importante, por lo que es mejor no dejarse llevar por la emoción de las fechas y terminar comprando más de lo pensado, sin pensar cómo pagar.
- Comparar precios. Antes de adquirir cualquier producto es bueno comparar precios en distintos comercios.
- Destinar una parte al ahorro. El organismo sugiere considerar al menos el 20% al ahorro, así se puede enfrentar imprevistos, pagar compromisos financieros o evitar la llamada cuesta de enero.
- Invertir: una parte del aguinaldo puede ser destinado a invertir y darle un rendimiento al aguinaldo, aunque para ello es clave conocer el propio perfil de riesgo.
Otro de los consejos que deja CONDUSEF es el de aprovechar el extra de Navidad para cancelar deudas. Sin embargo, tal decisión puede ser útil para ciudadanos de algunos países y no de otros. Por ejemplo, en Argentina, con el altísimo nivel de inflación que tiene el país, financiar las compras es una decisión útil para licuar el precio de lo que se compra, por lo que no tiene tanto sentido adelantar pagos.
