Bloomberg — A los inversores les preocupa que la Reserva Federal endurezca demasiado su política monetaria, y que eso catalice un aterrizaje duro para la economía de EE.UU. en 2023, a medida que el banco central continúa con su campaña más agresiva desde la década de 1980, de acuerdo a estrategas de Bank of America Corp. (BAC).
El sentimiento se ve ilustrado por una nueva oleada de ventas en el campo de la renta variable, que es improbable que termine mientras el mercado laboral se mantenga tenso, dijeron los estrategas, liderados por Michael Hartnett, en una nota.
Dijeron también que la política monetaria podría ser un factor en la reversión de la tasa de desempleo del país norteamericano, que consideran “anormalmente” baja. También esperan un evento crediticio entre prestamistas no bancarios (los llamados bancos en la sombra) para marcar el punto más bajo para las acciones el año que viene.
Las bolsas estadounidenses se preparan para una segunda semana de pérdidas, ya que la Reserva Federal reiteró su postura de línea dura tras subir los tipos de interés 50 puntos básicos el miércoles.
El índice S&P 500 va camino de registrar su peor resultado anual desde la crisis financiera mundial debido al aumento de la inflación, la subida de las tasas de interés y las consiguientes dificultades económicas mundiales. No obstante, los indicios de resistencia de las empresas y las esperanzas de que se reduzca la inflación han impulsado la subida de las acciones en el cuarto trimestre.
Según una nota del banco que cita datos de EPFR Global, los fondos de renta variable mundial recibieron US$18.000 millones en la semana hasta el 14 de diciembre, antes de que los comentarios de los bancos centrales, más duros de lo esperado, provocaran una venta masiva de acciones.
Los inversores destinaron US$25.000 millones a acciones estadounidenses por primera vez en cuatro semanas, mientras que los fondos de valor estadounidenses registraron una cifra récord de entradas, US$14.000 millones. Las acciones europeas registraron salidas por 44ª semana consecutiva, con US$4.000 millones.
--Con la colaboración de Michael Msika.