Bloomberg — Un juez de Bahamas denegó el martes la libertad bajo fianza a Sam Bankman-Fried y ordenó su ingreso en prisión en el país insular.
Durante la primera comparecencia de Bankman-Fried ante el tribunal desde su detención el lunes, la magistrada jefe Joyann Ferguson-Pratt declaró que el cofundador de FTX suponía un riesgo de fuga demasiado grande para ser puesto en libertad. Un abogado del cofundador de FTX había propuesto que su cliente pagara una fianza en efectivo de US$250.000 y llevara una tobillera para poder salir de su celda.
“El riesgo de fuga es tan grande que Samuel Bankman-Fried debe permanecer en prisión preventiva”, declaró la magistrada jefe Joyann Ferguson-Pratt. “No estoy convencida de que exista ninguna condición que pueda imponer a Samuel Bankman-Fried para garantizar suficientemente, debido a su acceso a importantes recursos financieros, que no se fugará ni podrá hacerlo”.
La vista para la extradición de Bankman-Fried se fijó para el 8 de febrero. El martes, durante la comparecencia, su abogado afirmó que lucharía contra los planes de enviarlo a Estados Unidos para ser acusado.
Los fiscales federales de Manhattan han acusado a Bankman-Fried de ocho delitos penales, entre ellos conspiración y fraude electrónico, por el presunto uso indebido de miles de millones de dólares en fondos de clientes antes del espectacular colapso de su imperio de criptomoneda el mes pasado.
Vestido con un traje azul y camisa blanca para la lectura de cargos, Bankman-Fried parecía a veces tembloroso e inquieto. Sus padres estaban presentes en la sala mientras su hijo de 30 años era calificado con frecuencia de “fugitivo”.
Después de que el juez anunciara que se le denegaría la libertad bajo fianza, su madre, visiblemente alterada, lo abrazó con los ojos llorosos. Bankman-Fried pudo estar 15 minutos con sus padres antes de ser conducido a prisión.
