Santiago — El Índice de Precios al Consumidor (IPC) de noviembre en Chile no solo sorprendió, sino que también desvaneció las esperanzas de un recorte de la tasa de interés de referencia en enero de 2023.
Hermann González, coordinador del área macroeconómica del Clapes UC, dijo que la inflación se desvía del escenario base del Banco Central de Chile (BCCh), aunque sigue dentro de los escenarios de riesgos contemplados por el ente emisor.
Cuando el ente emisor informó ayer su decisión de mantener la tasa de política monetaria (TPM) en 11,25%, luego de 11 alzas consecutivas desde julio de 2021, también advirtió: “La inflación sigue siendo muy elevada y la convergencia a la meta de 3% aún está sujeta a riesgos”.
Esta mayor persistencia de los altos precios podría estar manifestándose. Rosanna Costa, presidenta del BCCh, dijo que se reflejan escenarios donde la velocidad del proceso de convergencia inflacionaria da paso a ajustes más tempranos o tardíos de la tasa, respecto de lo considerado en el escenario base.
“Un factor relevante es la evaluación de la persistencia inflacionaria, ya sea por la magnitud y signo de nuevas sorpresas en la inflación o por el grado de ajuste de las expectativas. Escenarios donde estas variables denoten una menor o mayor persistencia inflacionaria, podrían llevar a un proceso de reducción de la TPM más adelantado o tardío que lo previsto”, aseguró ayer en una presentación del Informe de Política Monetaria (IPoM) ante la comisión de Hacienda del Senado.
¿Qué tanto se alejaría un recorte?
Scotiabank indica que el registro conocido ayer se ubica “marcadamente” sobre sus expectativas y retira su “call de recorte agresivo en la TPM en la reunión de enero” de la autoridad monetaria a pesar de que consideran que “los determinantes inflacionarios han estado y estarán alineados hacia menor inflación”.
Pese a que existían expectativas de un recorte de los costos de endeudamiento a corto plazo, van disminuyendo las posibilidades. “Hay cero por ciento de probabilidades. Ese escenario desaparece con este dato del IPC. Por otro lado, la velocidad con la cual se va a rebajar la tasa el próximo año –que sí bajará– es más gradual de lo esperado por el mercado”, explica González.
Para Alejandro Guin-Po, economista de LarrainVial Asset Management, prácticamente se esfuma la posibilidad de una baja en la tasa de interés de referencia para el próximo mes y la discusión se traslada hacia el segundo trimestre de 2023.
“Tal como se mencionó en el comunicado de la Reunión de Política Monetaria de diciembre, se está esperando una consolidación del escenario macroeconómico antes de algún movimiento. Ante ese escenario, lo más probable que es el IPoM de marzo sea la instancia más apropiada para un análisis más profundo y sea utilizado para dar luces sobre una disminución de la TPM en mayo”, explicó.
Guin-Po agrega que, aun así, si es que los registros inflacionarios de los próximos meses son favorables –es decir, bajo lo esperado– o bien que la actividad caiga significativamente, no se descarta que el ente emisor haga algún ajuste en marzo o abril.
Sorpresa “genuina”
La cifra sorprendió también al banco central, dijo el economista de Clapes UC. El dato no estaba incorporado en las proyecciones del IPoM, porque el ente emisor no tiene acceso a esta información antes que el mercado.
La proyección del BCCh, reflejada en este informe, apuntó a un alza de 12,3% de los precios al consumidor para finales de este año, pero ayer se supo que el IPC acumulado hasta noviembre alcanzó un 12,5%.
González estima que la inflación podría cerrar 2022 cerca de los 12,8% o 13%. “La inflación es una sorpresa genuina para el banco central”, expresó.