Bloomberg — Los comerciantes de Goldman Sachs Group Inc. (GS), en vías de obtener su máxima ganancia en más de diez años, se encuentran con una inesperada sorpresa, pues las tensiones de los costos fuerzan a la directiva de la entidad a reducir sus bonificaciones de fin de año.
Los profesionales de la división de mercados mundiales de la firma recibieron esta semana la indicación de que su paquete de compensaciones se recortará en un pequeño porcentaje de 2 cifras, indican personas conocedoras de las deliberaciones. Este dato no coincide con las proyecciones del sector ni con los resultados de la propia unidad. Los beneficios comerciales actuales de Goldman están a punto de sobrepasar los US$25.000 millones, y según los analistas, superarán la cifra del 2021 en un 15%.
Las conversaciones relativas a las compensaciones en esta fase son una primera andanada y pueden dar lugar a más cambios, explicaron dichas personas, que solicitaron que no se les nombrara para discutir las negociaciones internas. Pero la respuesta obtenida ya ha suscitado una nueva fase de negociaciones para solucionar algunas de las cuestiones planteadas.
Un vocero de Goldman Sachs declinó pronunciarse al respecto.
El nuevo ambiente en el sector es la austeridad, y numerosos veteranos dudan de las previsiones de beneficios para el próximo año. Los inversionistas premian la cautela y se muestran impacientes con los gastos que persisten.
Goldman está en una posición única este año. El CEO David Solomon y el presidente John Waldron están tratando de proteger la rentabilidad de la empresa después de que una incursión más costosa de lo esperado en la banca de consumo exacerbó el impacto de una desaceleración global en otras líneas comerciales, como la negociación. Solomon recortó sus aspiraciones de Main Street en octubre, una medida que fue aplaudida por los accionistas.
“La paciencia de los inversores se estaba agotando”, escribió en una nota el analista de Bank of America (BAC) Ebrahim Poonawala. “Afortunadamente, David Solomon y su equipo vieron la luz, dieron el giro y hay que suponer que la decisión ha contribuido” al rendimiento superior de las acciones este trimestre.
El retorno sobre el capital de Goldman, una medida de rentabilidad, se mantuvo en 12% durante los primeros nueve meses. Los líderes de la empresa están tratando de evitar que pierda terreno.
Puesto en cero
Otras divisiones importantes verán recortes aún mayores, aunque menos sorprendentes, en los fondos de bonificación luego de las caídas en esos negocios.
La unidad de banca de inversión se prepara para una caída mucho más pronunciada que las reducciones de aproximadamente el 25% que espera en los competidores, dijeron las personas. Y la cantidad de banqueros que reciben bono cero, o donas en la jerga de la industria, podría superar los 100, lo que sería un grupo inusualmente grande.
Una ráfaga de negociación desencadenada por la pandemia de Covid-19 en 2020, y un aumento en los precios de los activos a medida que los gobiernos impulsaron la economía, terminaron abruptamente este año con la caída de los mercados en todo el mundo. En Goldman, los ingresos de la banca de inversión cayeron un 45% en los primeros nueve meses, mientras que la gestión de activos generó un 71% menos.
En Wall Street, es probable que los banqueros que asesoran en fusiones y adquisiciones vean cómo sus primas disminuyen hasta un 20% este año, mientras que sus homólogos en el ámbito de la suscripción podrían ver cómo sus incentivos se desploman hasta un 45%, según un informe de la consultora de retribuciones Johnson Associates que se siguió muy de cerca el mes pasado.
Se espera que una nueva división de Goldman, denominada Platform Solutions, registre pérdidas significativas que se revelarán a los inversores el próximo mes, dijeron las personas. El banco ya ha dicho que necesitará escalar ese negocio para lograr una rentabilidad antes de impuestos. Esa unidad incluye las nacientes operaciones de tarjetas de crédito del banco y el negocio de préstamos a plazos GreenSky.
Los costos de tecnología y otros gastos también se suman a los dolores de cabeza, lo que le da a la gerencia poco espacio para dar pasos en falso.
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