Buenos Aires — Mientras las consultoras advierten sobre una inflación histórica para 2022, el presidente del Banco Central, Miguel Pesce, aseguró que espera un “proceso descendente” en 2023 y ratificó la meta del 60% para el año próximo.
Al cerrar las Jornadas Monetarias y Bancarias 2022, el funcionario consideró que “la solución del problema inflacionario, al final del camino, era el crecimiento”.
“La pelea contra la inflación, lejos de ser fácil, se ha mostrado compleja, pero esperamos que continúe un proceso descendente para alcanzar el objetivo de reducirla al 60% el año próximo”, indicó.
- Inflación mes a mes en Argentina: según el INDEC, en enero fue de 3,9%; en febrero, de 4,7%; en marzo, de 6,7%; en abril, de 6%; en mayo, de 5,1%; en junio, de 5,3%; en julio, de 7,4%; en agosto, de 7%, en septiembre, de 6,2% y en octubre, de 6,3%.
- La inflación acumulada en 2022: los datos oficiales arrojaron que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) trepó a 76,6% entre enero y octubre.
Pesce remarcó que se trata de “un fenómeno que involucra un desbalance entre oferta y demanda”, aunque señaló que “hay otros componentes que se deben tener en cuenta”.
Para Pesce, la inflación tiene múltiples causas
“Por eso decimos que es multicausal”, argumentó el presidente del Banco Central, quien apuntó: “No se trata de desmerecer el rol de las medidas tradicionales, sino de ponerlas en contexto y entender que en determinados países son de imposible instrumentación”.
“Hay países que pueden, bajo sus contextos, restringir la demanda, al punto de contener verticalmente los procesos inflacionarios a la espera de que sean superadas las restricciones al crecimiento”, analizó.
“Hay otros países en los que la desaceleración será gradual, pero siempre la perspectiva de corto, mediano y largo plazo debe estar en la superación de las restricciones al crecimiento que impiden la expansión de la demanda”, evaluó.
En tanto, confió: “Con respecto a las restricciones del crecimiento, tenemos motivos para ser optimistas”.