Ciudad de México — Andrés Manuel López Obrador fue como un ojo de huracán durante cuatro kilómetros de movilización de masas en la marcha de este domingo 27 de noviembre.
Caminar del Ángel de la Independencia al zócalo capitalino toma alrededor de una hora, pero el presidente hizo ese recorrido en seis horas. Daba pasos pequeños y avanzaba con relativa calma mientras alzaba los brazos para saludar a la multitud y empuñar la mano en señal de lucha.
Fuera de su círculo de seguridad la actividad fue ciclónica. La multitud se avalanchó en la cosmopolita avenida Paseo de la Reforma para tratar de fotografiarse con el mandatario o simplemente saludarlo de mano. Jóvenes, personas adultas mayores y personas con discapacidad fueron los asistentes de primera fila.
“¡Presidente, presidente!”, coreaban las personas que sostenían sus celulares en las manos para tratar de captar un gesto de AMLO, como se le conoce al presidente. “¡No está solo, no está solo!”, expresaba la gente para refrendar su apoyo al movimiento de Morena.
Tratar de acercarse a AMLO era como enfrentar un gran chorro de agua a contracorriente. Era sostener la respiración, empujar y enterrar los codos en las costillas del ajeno hasta conseguir adentrarse en el huracán. “¡Mi brazo!”, “¡mis piernas!”, se escuchaba de las personas intentando acercarse a AMLO.
La batucada, la banda norteña y las consignas de simpatizantes a mil voces no paraban.
Algunas personas cayeron como fichas de dominó cuando trataron de acercarse a AMLO, otras perdieron pertenencias como zapatos y mochilas. Autoridades de Protección Civil no fueron visibles en el recorrido y solo se identificó un módulo de primeros auxilios a la altura de la Torre de El Caballito.
La marcha y los presidenciables
AMLO inició la marcha alrededor de las 9:10 horas, lo acompañaron el secretario de Gobernación, Adán Augusto; el canciller Marcelo Ebrard, y la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum. Ellos tres son los presidenciables rumbo al 2024, avanzaron juntos los primeros metros, pero una hora después de iniciada la marcha Ebrard se separó y decidió caminar por su cuenta.
Presidencia planeó que a las 11:30 horas López Obrador estaría en el zócalo iniciando su mensaje con motivo de los 4 años de lo que él llama “Cuarta Transformación”, sin embargo, a esa hora apenas había avanzado del Ángel de la Independencia al Senado, una cuarta parte del recorrido total. Esta hora fue clave. El equipo de AMLO le sugirió continuar la marcha en uno de sus automóviles Jetta, pero AMLO rechazó la oferta.
El objetivo de hacer el recorrido en auto era evitar riesgos para el presidente. Casi en cualquier momento se podía caer ante el movimiento de las masas. AMLO sí tropezó en un par de ocasiones junto con Sheinbaum y Augusto, pero no pasó a mayores. Los tres estaban visiblemente cansados y con gesto de preocupación por la magnitud de la gente.
Durante su mensaje en el zócalo capitalino, desde donde se proclamó presidente legítimo de México el 20 d enoviembre de 2006, luego de acusar fraude en la elección presidencial de la que resultó ganador Felipe Calderón, preguntó ¿quién defiende realmente a un Gobierno democrático?
“El pueblo, básicamente el pueblo”, afirmó. “¿Saben que Ricardo Flores Magón dejó muchas enseñanzas? Y tenía una frase que a mí me gusta mucho y la repetí y la repetí y la sigo repitiendo, decía: ‘Sólo el pueblo puede salvar al pueblo”.
Dijo que el expresidente Benito Juárez, al que considera el mejor de la historia, decía que “con el pueblo, todo; sin el pueblo, nada”.
AMLO dijo fuerte que el pueblo respalda su proyecto de nación de “la Cuarta Transformación”, y prometió que nunca se va a traicionar al pueblo.
Esto fue una directriz clara para los presidenciables. Para AMLO hay relevo generacional cuando se trata de hablar de su sucesor o sucesora, pero consideró necesario recordar que el gobernante debe ejercer su servicio público con el pueblo.
El presidente dijo que en otros tiempos se podía ir en campaña a pedir votos, abrazar a la gente y luego llegar al cargo y olvidarse del pueblo. “A lo mejor en otros tiempos. Ahora, ya no”.
Señaló que un consejo para los que quieren dedicarse al noble oficio de la política es que no olviden que lo principal es tenerle amor al pueblo, querer al pueblo, profundo amor al pueblo. “Nada se logra sin amor al pueblo”.
Despliegue de masas y Humanismo mexicano
Cientos de autobuses, camionetas van, combis y microbuses ocuparon las principales avenidas de la Ciudad de México la mañana de este domingo 27 de noviembre. Por ejemplo, desde la zona del aeropuerto de Ciudad de México y la avenida Ignacio Zaragoza, al oriente de la Ciudad de México, se pudo observar el ingreso a la capital de autotransporte.
Todas las unidades observadas eran identificadas con la colonia, localidad o municipio provenientes. Algunas personas vestían los colores institucionales del partido Morena, guinda y blanco. Al llegar a las inmediaciones del Ángel de la Independencia, las personas descendían de los autobuses y combis y recibían indicaciones; se les repartían alimentos como tortas y fruta.
AMLO ironizó en la víspera sobre que en su marcha habría gente “acarreada”, dijo que ya eran tantos acarreados que no había transporte suficiente. La gente compró ese discurso del presidente y en la marcha las personas se decían orgullosas de ser acarreadas del mejor presidente que ha tenido el país, en su opinión.
Pero también hubo personas que rechazaron ese término. Dijeron que no son acarreados, que son personas que creen en el proyecto de nación y que, incluso, lamenta que AMLO no vaya a seguir otro periodo presidencial.
La señora Concepción García, de Ciudad de México, es una persona adulta mayor y comentó que está agradecida con AMLO por la pensión que se les entrega. Al borde del llanto dijo que espera que el próximo presidente también apoye a los más pobres.
La marcha de apoyo a López Obrador fue notablemente colorida e ingeniosa. Botargas de AMLO, monigotes de AMLO, souvenirs de AMLO, playeras y gorras con estampados alusivos a AMLO, y muñecos de AMLO llamados “pejeluches”. Es la Amlomanía.
Ya en el zócalo, a eso de las 15:00 horas, el presidente hizo uso de la voz poco más de una hora. Dio el discurso que tenía planeado a pesar del cansancio. Ahí, en el templete hizo un anuncio sobre el aumento del salario mínimo y también lanzó una nueva corriente de su Gobierno: humanismo mexicano.
Dijo que había que buscar un distintivo al humanismo en México. “Lo esencial de nuestro proyecto proviene de nuestra grandeza cultural milenaria y de nuestra excepcional y fecunda historia política”.
Bajo esta nueva corriente de humanismo mexicano -indicó- en la nueva política económica, moral y social se ha desechado la obsesión tecnocrática de medirlo todo en función de indicadores de crecimiento que no necesariamente reflejan las realidades sociales.
Más allá del simple crecimiento económico -agregó- es fundamental desterrar la corrupción y los privilegios para destinar todo lo obtenido y ahorrado en beneficio de las mayorías del pueblo y, de manera específica, en beneficio de los más pobres y marginados.
La reforma electoral y el INE no estuvieron en el discurso del presidente.
El gabinete de AMLO
La marcha con motivo de los 4 años de Gobierno de AMLO convocó a decenas de figuras políticas del movimiento de AMLO.
Raquel Buenrostro, secretaria de Economía, acudió a la marcha flanqueda de sus dos más cercanos colaboradores, Alejando Encinas, subsecretario de Comercio Exterior, y Luis Abel Romero, subsecretario de Industria y Comercio.
Se trata de tres funcionarios clave en este momento para el país, ya que de ellos depende en buena parte la resolución de la disputa energética bajo el Tratado en México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Buenrostro dijo que la gente acudió a marchar muy contenta por la celebración de 4 años de transformación del país. Durante la parada en Paseo de la Reforma, los simpatizantes de AMLO manifestaron la postura presidencial de defender la soberanía del país frente a Estados Unidos.
¿Qué le dice Raquel Buenrostro a esas personas? La secretaria de Economía respondió que la soberanía y el Estado de Derecho son dos cosas diferentes, “se pueden hacer las dos cosas”.
Rocía Nahle, secretaria de Energía, inmersa también en la disputa comercial con EE.UU., asistió a la marcha y se le vio dando algunos pasos de baile con batucada de fondo. Cuando pasó frente al bloque de afiliados al Sindicato Mexicano de Electricistas, los extrabajadores le demandaron solución a su conflicto laboral.
Luisa María Alcalde, secretaria del Trabajo, marchó junto con Nahle, pero ella no recibió consignas, por lo que continuó su avance con pasitos de baile.
La gobernadora de Campeche, Layda Sansores, desfiló por Paseo de la Reforma y recibió muestras de apoyo de algunas personas respecto de audios que ha exhibido del senador de Morena, Ricardo Monreal, quien estuvo ausente en la marcha por cumplir una tarea legislativa del Senado en España. En la marcha se pudieron ver mantas con la leyenda “Monreal traidor”, en alusión a que el senador podría optar por unirse a la oposición para competir por una candidatura presidencial en 2024.
En la marcha también desfiló Delfina Gómez, exsecretaria de Educación Pública en el gabinete de AMLO, y ahora precandidata de Morena a la gubernatura del Estado de México, la cual es clave al ser el preludio a la elección presidencial de 2024.
Hugo López-Gatell, subsecretario de Prevención y Promoción de la Secretaría de Salud, marchó también acompañado de su esposa y ataviado de una camisa guinda; las personas se le acercaban para pedir fotografía porque lo vieron en la televisión muchas veces explicando el Covid-19.
Rogelio Ramírez de la O, secretario de Hacienda, no asistió a la marcha de AMLO y tampoco estuvo presente en el mensaje del presidente en el zócalo capitalino.
Claudia Sheinbaum, jefe de Gobierno, estuvo todo el tiempo al lado del presidente López Obrador. Todo el tiempo trató de mantener la sonrisa. Repartió besos, abrazos y cientos de selfies. Fue de las últimas en retirarse de Palacio Nacional cuando concluyó el mensaje de AMLO por los 4 años de Gobierno.
“¡Presidenta, presidenta!”, decían las personas a la jefa de Gobierno. Al final de la jornada reportó saldo blanco y la participación de 1,2 millones de personas en la marcha de apoyo a AMLO.