Ciudad de México — La empresa estatal Petróleos Mexicanos, conocida como Pemex, sigue controlando el abasto de gasolina y diésel en México, a pesar de que las gasolineras han abandonado su franquicia.
Aunque Pemex ha perdido casi la mitad de gasolineras con su franquicia desde que se abrió el mercado en 2013, el 83% del abasto en el país sigue en manos de la petrolera mexicana, según Alejandro Montufar, CEO de la firma de precios PetroIntelligence, durante un evento de la Asociación Mexicana de Proveedores de Estaciones de Servicio (Ampes).
“Hay que tener cuidado al pensar que Pemex realmente tiene el 50% del mercado”, dijo Montufar refiriéndose al uso de su marca por parte de los gasolineros.
Las marcas privadas que más quitaron participación de mercado a Pemex fueron OxxoGas, G500, ExxonMobil, Repsol, Shell y Chevron, tras la reforma energética del expresidente Enrique Peña Nieto.
El analista recordó que Pemex ofrece descuentos atractivos, pero le ha costado tiempo porque el promedio de un contrato con marcas privadas es de cinco años.
”Las cláusulas de recisión de contrato frenan que más marcas regresen con Pemex”, señaló.
En noviembre de 2021, Pemex presentó a la Organización Nacional de Expendedores de Petróleo (Onexpo) una estrategia para recuperar mercado de abasto y de franquicia a través de descuentos, incluso ayuda con permisos de gasolineras con el regulador, la CRE.
La Onexpo dijo este año que los dueños de gasolineras están abandonando las marcas de Gulf, BP y Total para regresar con Pemex.
Montufar también mencionó que la aprobación masiva de permisos para gasolineras de la CRE, que este año ya suman más de 400, corresponden a marcas con Pemex.