Bloomberg — El Consejo de Derechos Humanos de la ONU votó este jueves a favor de abrir una investigación internacional sobre presuntas violaciones de DD.HH. por parte de las autoridades del país en el marco de su represión portal a las protestas que tienen lugar hace semanas en el país.
En una sesión especial del organismo, 25 países acordaron establecer una misión independiente para investigar las muertes, lesiones, abusos, encarcelamiento e intimidación sobre los manifestantes y sus familias desde el comienzo de las protestas el pasado 16 de septiembre.
Seis países votaron en contra de la resolución. Entre ellos se cuentan China y Venezuela, mientras que otros como Brasil, India, Catar y los Emiratos Árabes Unidos se abstuvieron.
“El uso innecesario y desproporcionado de la fuerza debe terminar”, dijo Volker Turk, alto comisionado de las Naciones Unidas para los derechos humanos, y agregó que en Irán se estaba produciendo una “crisis de derechos humanos en toda regla”.
Docenas de países condenaron las acciones de la República Islámica en la sesión y pidieron investigaciones independientes para recopilar pruebas de violaciones de derechos humanos para su uso en cualquier proceso legal futuro en tribunales nacionales o internacionales.
El levantamiento fue provocado por la muerte de Mahsa Amini, de 22 años, días después de que fuera arrestada por la llamada policía moral de Irán por presuntamente violar los códigos religiosos de vestimenta. Se ha convertido en el mayor reproche público al sistema teocrático que gobierna Irán desde 1979.
Los grupos de derechos humanos estiman que entre 305 y 420 personas han sido asesinadas hasta ahora por las fuerzas de seguridad, incluidos entre 41 y 60 niños. Los medios estatales iraníes no han proporcionado un número de muertos desde el 24 de septiembre, cuando dijeron que 41 personas habían muerto.
La sesión fue propuesta por Alemania e Islandia y cuenta con el apoyo de más de 50 países. Muchos países enfatizaron su preocupación por los ataques violentos contra mujeres y niños y el uso de la pena de muerte por parte de Irán contra muchos de los miles de manifestantes que están detenidos.
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