Bloomberg Línea — El presidente venezolano, Nicolás Maduro, informó en un evento televisado que este año el país ya ha obtenido ingresos por US$3.500 millones de parte del sector petrolero, pero esta cifra aún no es ni el 10% de lo que “era el ingreso petrolero normal del país”.
Según el mandatario, quien ha señalado en diferentes ocasiones este año que Venezuela está recuperando su fortaleza petrolera y la industria está mejorando, los ingresos anuales en el país antes de las “sanciones criminales” de Estados Unidos rondaban los US$56.000 millones, ganancia que se redujo hasta US$700 millones, aunque no señaló a qué año correspondía.
“Está creciendo la nueva economía, el renacimiento de la nueva economía nacional. Está creciendo la economía real, la economía no petrolera. A la par vamos también con la economía petrolera”, dijo Maduro, al visitar el complejo petroquímico Ana María Campos.
El más reciente informe de la OPEP indicó que para octubre la producción de petróleo en Venezuela creció, aumentando en promedio 51.000 barriles de crudo por día, para llegar a un total de 717.000 barriles por día en el décimo mes del año. Sin embargo, la cifra aún está lejos de las estimaciones que tenía el presidente en enero, cuando indicó que la industria estaba lista para producir 2 millones de barriles diarios, como ocurrió en las últimas dos décadas.
Para Maduro, aún con las sanciones contra la economía nacional y la adversidad de la “gestión bolivariana”, los oponentes no “han podido con nosotros, ni con sanciones, ni con bloqueos, ni con guerra económica, ni con amenazas, ni podrán jamás”.
De acuerdo con la OPEP, se espera que la demanda de petróleo en América Latina siga mejorando en el cuarto trimestre del año, apoyada por la previsión de un saludable crecimiento anual del PIB del 2,7% en 2022.
En octubre, el gobierno de Estados Unidos señaló que Venezuela aún tenía que hacer “mucho” para que se aliviaran las sanciones económicas, aún cuando se han permitido algunas exportaciones de petróleo bajo contratos de crudo por deuda.
Ese mismo mes, Maduro pidió a la Cepal estudiar el impacto de las medidas “coercitivas unilaterales” que pesan sobre la nación, mientras que reactivó parte de su agenda internacional para retomar diálogos internacionales y validar parte de sus gestiones, como su asistencia a la COP27.