Bogotá — El profesional en comercio exterior y samario Stalin Ballesteros se posesionó a finales de septiembre pasado como director de la Agencia Nacional de Contratación Pública-Colombia Compra Eficiente, entidad que busca reorientar bajo el mandato del presidente Gustavo Petro. Y es que son varios los reparos que hace a la misma, empezando por la alta concentración de contratos en la capital colombiana, lo que en sus palabras significa un rezago para la economía popular; y siguiendo con plataformas como el SECOP, sobre la cual hará cambios profundos.
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En entrevista con Bloomberg Línea, Ballesteros, quien también aspiró al Senado de la República por el Pacto Histórico en las pasadas elecciones legislativas, indicó que “encontramos una entidad centralizada, que solo se piensa desde Bogotá, en muchos casos es excluyente también no solo con los regiones sino con los actores de la economía real del país. La contratación estatal, a través de Colombia Compra Eficiente, está centralizada en Bogotá y en los sectores económicos alrededor de la gran capital, lo que genera también una exclusión”.
Y en esa línea manifestó que “solo el 12,5% de la contratación que pasa por SECOP II se ha hecho con mipymes, por ejemplo, mientras que la economía popular, que es el grueso de la economía real del país, ha quedado rezagada de las posibilidades de recibir los recursos del constituyente primario, del contribuyente a la economía del país, a través de la contratación pública”.
Por lo que el funcionario calificó de “fundamental” la reorientación de esta entidad, al ser un mandato no solo del Ejecutivo sino un compromiso con el pueblo.
Lo que también trae consigo modificaciones a las plataformas del SECOP y de la Agencia de Contratación. “Se necesitan hacer cambios profundos a las plataformas, basándose en los lineamientos del Gobierno Nacional, que vienen de la mano con los cambios normativos que se buscarán realizar en la contratación estatal, los cuales tienen que apuntarle a las economías populares y a la democratización de la información. Se van a modificar los aplicativos en términos técnicos para que se acoplen a la realidad de nuestro país, el cual tiene grandes problemas de conectividad en diferentes partes del territorio”.
“Queremos incursionar en una nueva gran plataforma que integre la mayoría de herramientas que utiliza el Estado en sus entidades”
Stalin Ballesteros, director de Colombia Compra Eficiente
Esto, además del mantenimiento evolutivo y correctivo propio de cada plataforma. En lo que resta del año se tiene presupuestado hacer dos: uno el 10 de diciembre y otro al finalizar el año y con el fin de hacer correcciones en las funcionalidades existentes. Lo anterior alineado a los temas normativos y buscando mejorar la experiencia del usuario, que ha sido la mayor queja, según aseguro el director.
“Por otro lado tenemos un gran reto tecnológico, queremos incursionar en una nueva gran plataforma que integre la mayoría de herramientas que utiliza el Estado en sus entidades. En este momento realmente es necesario buscar los desarrollos tecnológicos que suplan esta necesidad”, agregó Ballesteros.
Para el director, la Agencia ha tenido una orientación histórica hacia la reducción de costos para el Estado, es decir, conseguir que se compre de una manera más barata para que pueda reducírsele costos agregados al contribuyente. Lo que, según él, lleva a un debate de qué es la compra pública, si una política pública o un instrumento para ejercer política pública.
Y sobre esa discusión planteó una dualidad: “Debe ser más preocupante conseguir a menos precio o puede ser más importante fortalecer las economías territoriales a través del fomento de la productividad. Es un debate que también se plantea a profundidad”.
Por todo lo anterior su principal objetivo es promover una política de compras públicas que esté más como instrumento del Estado para incentivar a empresas productoras y empleadoras radicadas en el país, que es lo que denomina economía popular. “Para esto generaremos mecanismos de compras que fortalezcan no solo las economías populares sino que tengan una faceta regional, social, solidaria, de los pequeños y medianos productores, de las micro y pequeñas empresas, de las organizaciones campesinas, étnicas, de las mujeres”, detalló.
Asimismo refirió un ejemplo basado en la necesidad de “arrebatarle” a la corrupción, a través de la transparencia, el Plan de Alimentación Escolar y el sistema de alimentación en la primera infancia. Con el objetivo de convertirlos en instrumentos participativos, pertinentes y liderados por la comunidad educativa: y resaltó que estén enfocados precisamente en el fortalecimiento de prácticas alimentarias sanas y diferenciadas según región, entorno cultural y mejores condiciones para el rendimiento escolar de los niños y niñas del país.
Transición en la contratación
Frente al desarrollo de los contratos y a la transición que se ha tenido entre el anterior y el nuevo gobierno, quien también es magíster en relaciones internacionales, sostuvo que es importante tener en cuenta que algunos de los gastos vienen comprometidos de antes, que son recursos que se vienen ejecutando con anterioridad al 7 de agosto.
Por lo que explicó que la transición es lenta y es más aún en temas contractuales porque estas son políticas de Estado y no de Gobierno. “En muchos casos, esta transición ha dificultado los procesos de contratación y por la celeridad que se tiene se tiende a utilizar en mayor medida en la contratación directa”.
