Bloomberg — Donald Trump intensificó su rivalidad con Ron DeSantis, advirtiendo que expondría información perjudicial si el gobernador de Florida lo desafía por la nominación presidencial republicana de 2024.
“Si se presenta, podría hacerse mucho daño”, dijo Trump en una entrevista el lunes con Fox News y otros medios. “Te diría cosas sobre él que no serán muy halagadoras: sé más sobre él que nadie, aparte de, quizás, su esposa”.
La amenaza es un movimiento familiar del libro de jugadas de Trump para frustrar a los posibles oponentes. También es la última señal de que el expresidente ve a DeSantis como su principal rival en unas posibles primarias presidenciales del Partido Republicano en 2024. Las encuestas muestran a DeSantis como el rival más fuerte de Trump para la nominación en caso de que ambos se presenten.
“No sé si se presenta”, dijo Trump en la entrevista. “Creo que a la base no le gustaría, no creo que sea bueno para el partido”.
Los votantes estaban votando en las consecuentes elecciones de medio término del martes mientras se publicaba esa parte de la entrevista de Trump. En Florida, DeSantis fue reelegido por un cómodo margen frente al aspirante demócrata y ex gobernador Charlie Crist.
Un mensaje dejado a la campaña de DeSantis no fue devuelto inmediatamente.
Los comentarios de Trump en la entrevista marcaron su más fuerte ataque público hasta la fecha contra DeSantis. El sábado, el expresidente mostró los números de las encuestas en una pantalla que lo mostraban dominando un potencial campo presidencial del GOP en 2024 y se refirió al gobernador como “Ron DeSantis”.
Estados Unidos vota
Los votantes estadounidenses emiten su veredicto sobre la gobernanza de los demócratas y deciden si entregan el control del Congreso a los republicanos para la segunda mitad del mandato del presidente Joe Biden. Un relevo republicano daría paso a una nueva era de gobierno dividido.
Algunas urnas cerraron en el este de EE.UU. a las 7 de la tarde, y los primeros resultados en los distritos más disputados darán alguna indicación de si los republicanos lograrán una derrota. El impulso ha favorecido a los republicanos en las últimas semanas, con la preocupación por la inflación y la recesión pesando en la mente de los votantes. Pero el derecho al aborto y una lista de candidatos republicanos respaldados por Trump aún podrían motivar a los demócratas a acudir a las urnas.
Los estadounidenses dicen que la economía es su prioridad número 1. Los dos partidos que compiten por sus votos han estado pintando imágenes dramáticamente diferentes de su estado actual de salud.
Los republicanos, que sólo necesitan un puñado de escaños para hacerse con el control del Congreso, han puesto la subida de los precios en el centro de su campaña y han culpado a Biden y a su partido.
La inflación -que, junto con la economía en general, suele encabezar las listas de preocupaciones de los votantes- es la más alta en una generación, y se come los sueldos.
Los demócratas se esforzaron por transmitir un mensaje coherente sobre la economía. En ocasiones, promovieron el ahorro de costes de los consumidores en los medicamentos recetados y los seguros de salud gracias a la Ley de Reducción de la Inflación de Biden, arremetieron contra la especulación de las compañías petroleras con amenazas de un impuesto sobre los beneficios extraordinarios y aprovecharon las declaraciones de algunos líderes del GOP que amenazaban con recortar las prestaciones de la Seguridad Social y Medicare.
Los resultados de algunas contiendas podrían no conocerse hasta dentro de unos días, y el control del Senado de EE.UU. podría no conocerse hasta dentro de un mes si la contienda en Georgia llega a una segunda vuelta.
