Bloomberg Línea — El precio del cobre lleva en lo que va de 2022 una caída del 16% en la Bolsa de Metales de Londres y en los últimos meses, la constante para este metal ha sido la volatilidad, con una tendencia a la baja, algo que genera preocupación en las arcas del Estado chileno y en el país en general, dado que se trata del producto exportable más importante.
Pero el viernes llegó algo de brisa fresca, dado que este metal tuvo su mayor avance intradiario en Londres en 13 años, al subir un 7,12%, debido a rumores respecto a que el gobierno chino relajaría las estrictas medidas que ha llevado a cabo para enfrentar el Covid-19. Sin embargo, el balance anual sigue siendo negativo.
A qué se debe el mal año del cobre
“Los motivos de los precios a la baja del cobre en los días anteriores provienen por los miedos de la recesión causada por la subida de la tasa de política monetaria de los diferentes bancos centrales, que han llevado a que las perspectivas de demandas de cobre vayan disminuyendo”, señaló Pablo Mundaca, analista senior de mercados de XTB Latam.
Otro de los factores que añadió el especialista es “el miedo en el rubro inmobiliario, tanto en China como en el resto del mundo”.
El dato positivo que destaca Mundaca es que los estrictos confinamientos en China podrían llegar a su fin, “aliviando a gran parte del mercado”.
Una complicación para el Gobierno de Gabriel Boric
Dado que el cobre representa el 54% de la canasta exportadora y más del 20% de los ingresos fiscales del país, una situación bajista en este metal generaría “una caída en los ingresos de la arcas fiscales y complicaría las nuevas reformas del Gobierno, así como también la creación de nuevos empleos”, indicó el ejecutivo de XTB LAtam.
Se estima que por cada centavo que aumenta el cobre entran unos US$60 millones al fisco chileno.
La caída del precio, en cifras
Por su parte, Juan Cristóbal Ciudad, analista senior de Plusmining, sostuvo que el efecto del menor precio del cobre sobre la economía se puede ejemplificar con lo que sucede en exportaciones y cuentas fiscales. Al respecto, detalló:
- “En el caso de las exportaciones, la caída en 2023 en el precio promedio esperado se traduciría en una baja en torno a US$5.000 millones”.
- “En el caso de las cuentas fiscales, el efecto precio del cobre causaría una menor recaudación por US$1.000 a 1.500 millones respecto al 2022″.
- “No obstante, una mayor holgura fiscal para gastos permanentes vendría por el aumento del precio usado en el balance estructural (desde US$331 la libra en 2022 a US$374 la libra en 2023) que determina el Comité de Expertos”.
Complicaciones en el tipo de cambio
“Por otra parte, el menor precio del cobre unido a las altas tasas de interés internacionales, no son factores propicios para la moderación del tipo de cambio”, explicó Juan Cristóbal Ciudad.
En tanto, Mundaca coincidió en que otras complicaciones pueden tener que ver con el tipo de cambio, “que tiene una correlación directa”, por lo que una caída del precio afecta en gran medida en una apreciación del dólar frente al peso chileno, al contrario una subida, debilita el valor del dólar frente a la moneda nacional.
La volatilidad de los últimos meses
Ciudad recordó que entre mayo 2022 y julio 2022 el precio del cobre tuvo una fuerte corrección, producto de la inflación más alta a lo esperado en EE.UU., y la consecuente expectativa de mayores tasas de interés por parte de la FED.
“Desde julio a la fecha, el precio del cobre ha evolucionado dentro de un amplio canal (US$330-US$370 la libra), con un sesgo al piso de ese canal”, explicó.