Roque Benavides: “No tengo ningún interés en formar un partido político”

El empresario peruano precisa que desde su espacio buscará promover la institucionalidad política en Perú. En conversación con Bloomberg Línea, comenta sobre los siguientes planes de la minera Buenaventura

El ejecutivo habla durante una entrevista en las oficinas de la empresa en Lima, Perú, el viernes 29 de abril de 2022. Benavides dijo que Buenaventura, la mayor productora de metales preciosos de Perú que cotiza en bolsa, sigue adelante con las inversiones. Fotógrafo: Angela Ponce/Bloomberg
03 de noviembre, 2022 | 08:30 AM

Roque Benavides Ganoza se mantiene como uno de los empresarios mineros más reconocidos en el Perú. Como presidente del Directorio de a Compañía de Minas Buenaventura, Benavides dialogó con Bloomberg Línea sobre los planes de la empresa que acaba de retomar de forma progresiva la construcción del proyecto San Gabriel, cuya inversión para este 2022 asciende a US$65 millones, así como su afinidad con la política peruana y las perspectivas que mantiene para el país andino en el mediano plazo.

¿Considera que el gobierno tiene intenciones de impulsar la inversión minera?

A mí me impresionó el lenguaje del ministro de Economía Kurt Burneo y la ministra de Energía Minas Alessandra Herrera en el último Perumin, es importante que hayan estado presentes. La asistencia del presidente del Consejo de Ministros también lo fue. Hay una voluntad y se dan cuenta que no tienen otra posibilidad de inversión que la industria minera, y que puede atraer otras inversiones. Es muy positivo.

¿Cómo ve al ministro Burneo?

Veo a un hombre que tiene voluntad de dialogar. Evidentemente tiene su sesgo ideológico, pero es mucho más constructivo. Veo con entusiasmo que habla de competitividad, que ha hablado a favor de no subir impuestos, y no se trata de que uno esté preocupado por si va a pagar menos o más impuestos. Es en comparación con el resto del mundo que tenemos que saber si somos competitivos.

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El ministro Burneo comentó desde Perumin que los conflictos sociales que vienen afectando al rubro minero también tienen un componente de responsabilidad empresarial. ¿Cómo recibe este mensaje?

Lo escuché, y creo que son cosas que él tiene que decir. No está mal que lo diga. Pero viniendo de donde venimos, tal vez debería haber un poco más de autocrítica a nivel de gobierno.

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¿Cree que el presidente Castillo escucha al ministro de Economía?

No lo sé. Esa es una de las grandes preguntas y le hice esa pregunta al ministro Burneo, pero no me contestó. Es evidente que es una pregunta un tanto indiscreta a un ministro de Estado. En su discurso él dijo que era respetuoso de las otras carteras, cosa que a mí me sorprendió, pero dentro del teje y maneje de la política es positivo.

Usted ha criticado antes los cambios que hubo en el Ministerio de Energía y Minas ( Minem). ¿Cómo evalúa la actual gestión de la ministra Alessandra Herrera?

Por lo que veo la ministra Herrera tiene algunos años en el sector Energía y Minas y creo que está dando la confianza a los funcionarios para quedarse en el Minem. Creo que eso es fundamental. La época en que Perú Libre tenía que copar todos los puestos, especialmente en el Minem, que era evidente que estaba asignado a Perú Libre, ya está pasando, porque evidentemente no avanzaba a ningún lado.

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Cuando se dieron muchos cambios de funcionarios en Minem, ¿vio situaciones significativas que dañaran al sector?

Sin ninguna duda. Hay mucha gente que se ha retirado del ministerio, los mismos viceministros y ministros. Gente que entraba, no sé con qué criterio, a golpear al sector más que a promoverlo. La función de un ministro debe ser promover, y en ese talante está la ministra. Hay una sintonía positiva, y en cualquier organización es bueno verlo. En eso hay que reconocer un cambio positivo.

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Uno de los temas que más se discute desde el sector minero como un problema para el desarrollo es la “permisología”; el tiempo que toma realizar trámites para obtener permisos o lo engorroso del proceso. ¿Cómo ve los anuncios sobre cambios y mejoras desde el gobierno?

Podrían ser mucho más agresivos en los cambios. Mucha gente no entiende que la competitividad minera tiene que ver con eso también. Las aristas que se tienen que evaluar en competitividad son potencial geológico, conflictividad social, infraestructura y la ‘permisología’. Es un término perverso hablar de la ciencia de los permisos. Ya bastante difícil es producir como para tener que aplicar la ciencia de los permisos. Hubo un planteamiento del doctor Ricardo Labó de promover que los permisos sean en paralelo y no en serie. Hoy para conseguir permiso de construcción tienes que conseguir primero el EIA (estudio de impacto ambiental), así que hacerlo en paralelo puede reducir los tiempos. Estamos comenzando a preocuparnos por el problema de cuánto tiempo toma sacar adelante un proyecto, porque después de Quellaveco en el fondo no viene un gran proyecto minero y eso es muy preocupante.

También hay un riesgo con las reservas.

Es que si en Perú toma un año conseguir un permiso para explorar y en Canadá toma dos semanas, es evidente que estamos retrasados.

Usted dijo antes que el presidente Castillo aviaba las confrontaciones. ¿Le parece que aún es así?

Creo que ha logrado ser elegido enfrentando a peruanos. Pero una cosa es con guitarra y otra con cajón. Una vez elegido creo que comienza a darse cuenta que la economía peruana tiene que funcionar. Es evidente que el señor Bellido fomentaba la confrontación, y el señor Torres inicialmente también lo hacía. Es un síntoma positivo que ya no sea tan así.

En San Gabriel, proyecto de Buenaventura, también hubo conflictos.

Es interesantísimo el caso de San Gabriel porque entraron 40 individuos y se hizo un pequeño daño, pero salieron en defensa nuestra las comunidades y nuestro personal que ha venido manejando esto con un gran tino. Estamos retomando la construcción ante un ambiente de más tranquilidad, pues no queremos exacerbar los ánimos. Así como las personas, los proyectos también tienen que manejarse con tino. Estamos en eso.

Foto: Dado Galdieri/Bloomberg

En el resto de la cartera de Buenaventura, ¿qué se está avanzando próximamente?

Avanzamos con Uchucchacua para retomar la producción y este proyecto viene acompañado de Yumpaq, que nos entusiasma mucho. Uchucchacua está en el departamento de Lima y Yumpaq en Cerro de Pasco, así que será una mina que se explotará en ambas regiones para que todo se procese en nuestra planta de Lima. Estamos muy entusiasmados con las exploraciones en Yumpaq y esperamos que le dé larga vida al proyecto. Venimos explorando ya hace más de dos o tres años, hemos actuado con cautela y tino para actuar con las comunidades.

Luego tenemos Trapiche, el proyecto de cobre que está en la zona de Antabamba, Apurímac, y con quienes estamos tratando. Estamos avanzando en la exploración. Un proyecto de cobre toma aún más tiempo. Debería tomar más de dos años. Hacia el 2024 se podría tomar alguna decisión.

Había interés de Buenaventura en explorar algunos otros mercados.

No tenemos nada en este momento. En el pasado hemos explorado en Ecuador, Argentina, Chile y Brasil. Pero estamos suficientemente ocupados con los proyectos en Perú como para estar diluyéndonos.

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LA POLÍTICA EN PERÚ

El empresario Ricardo Máquez, expresidente de la Sociedad Nacional de Industrias, anunció que buscará postular a la presidencia en las próximas elecciones con la agrupación política Alianza Democrática y dijo contar con su apoyo. ¿Usted también lo integrará?

Él mencionó que su amigo Roque Benavides lo apoyaba. Yo quiero confirmar que soy amigo de Ricardo Márquez, pero no tengo ningún interés en promover un partido político. Tengo un ancestro que tiene que ver con el doctor Haya de la Torre, y si en algo me piden mi lealtad, mi lealtad está con la memoria de Haya de la Torre. No tengo ningún interés en formar un partido político. Alianza Democrática la pensamos como una suerte de ‘think tank’ para poder hacer propuestas, pero no necesariamente como un partido. Ahora el doctor Márquez y el doctor César Candela lo quieren formar como un partido político y es decisión de ellos, pero yo no voy a formar parte.

Si hubiera la opción de postular con el partido aprista, ¿lo haría?

No lo sé. Eso es especular. Primero espero que los partidos políticos se fortalezcan y se inscriban. El partido aprista no está inscrito, ¡es insólito! Noventa y dos años de fundación y han perdido la inscripción...

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¿Pero no buscaría participar de algún modo en ese proceso con el Apra, ante su afiliación con el partido?

Yo tengo mi corazoncito, por supuesto, con Haya de la Torre, y haré todo lo posible por que la institucionalidad política se promueva. Creo que estos partidos políticos, poco menos que vientres de alquiler, no favorecen a la institucionalidad; necesitamos partidos más sólidos. Al Apra le pueden criticar algunas cosas, pero es un partido con ideología, con mística, y es indispensable, como lo es Acción Popular, el PPC (Partido peruano cristiano), y seguramente algún partido de izquierda, que yo aún no lo veo. Porque evidentemente Perú Libre es partido del señor Vladimir Cerrón y punto.

El Partido Aprista Peruano, uno de los partidos más antiguos en el Perú, no cuenta con inscripción válida ante el Jurado Nacional de Elecciones en la actualidad.

¿Y Fuerza Popular?

Fuerza Popular es un caso interesante porque tiene una estructura, pero es un partido que no sé si hay una ideología detrás. Tiene una mística fujimorista con nombre y apellido. Enhorabuena que exista, y es evidente que ha puesto a congresistas y ha tenido presencia en los últimos años. Eso es lo que necesitamos, que los partidos políticos tengan presencia y continuidad. Lo que tenemos ahora es un desmadre. La reforma política se cae de madura y necesitamos de la política, que tiene un impacto sobre todo. A mí me acusan a veces de politiquero; bueno, creo que todos los peruanos tenemos que preocuparnos de eso. Si no opinamos, no nos quejemos después.

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En el corto plazo, entonces, usted no está contemplando posibilidades de participar en política.

No. Yo opino porque pienso que tengo responsabilidades para con el país, con mi familia, la minería, Buenaventura, y creo que eso es perfectamente razonable. Eso no quiere decir que estoy buscando un puesto público.

¿Pensaría usted que este gobierno podría impulsar la inversión privada para que se recupere la confianza?

No sé cuánta convicción hay. Habría que cambiar a mucha gente. No veo la actitud del presidente y no veo ese entusiasmo del gabinete. Pero como peruano estoy dispuesto a ser sorprendido, y si es así enhorabuena. Creo que la política debe dialogar y lamentablemente un Congreso con 13 bancadas es difícil de manejar, pero no imposible. Los radicalismos se tienen que dejar de lado para entrar en un pragmatismo y lograr que se generen esos puestos de trabajo producto de la inversión privada. Acá no hay discusión: la inversión privada en Perú representa el 80% de la inversión y 20% es inversión pública. Cuando piensen en inversión privada, pensemos en la micro y pequeña empresa. Me da la impresión que a veces la ideología hace que le pongan nombre y apellido a la inversión, que solamente los ricos y famosos se benefician. Hay que entender que la inversión no es solo de unos pocos.

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¿Usted estaría de acuerdo con un adelanto de elecciones?

Si siguen descubriéndose hechos de corrupción, si siguen con estas investigaciones, a mí no me sorprendería que este gobierno tarde o temprano caiga. El señor Kuczynski renunció por mucho menos que estos escándalos. Y no tengo por qué defenderlo, pero acá hay muchas investigaciones y no hay ninguna vocación de renuncia. No sé qué sería mejor, pero la inestabilidad no ayuda. Hay que tratar de dialogar entre peruanos y enrumbar el país. El presidente Castillo debería convocar a la mejor gente. El problema es que los líderes convocan a gente de su propio nivel.

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