Bloomberg — Las acciones siguen cayendo este jueves en EE.UU., al tiempo que los operadores apuestan que las tasas de interés de la Reserva Federal se mantendrán más altas durante más tiempo para aplacar la inflación.
La libra se hundió luego de que el Banco de Inglaterra (BOE) dijera a los inversores que moderen sus expectativas de subidas de tasas.
El S&P 500 cae por cuarta sesión consecutiva. Los rendimientos de los bonos del Tesoro suben junto con el dólar.
Las tasas de swaps relacionadas a las próximas reuniones de la Fed subieron aún más: los contratos a mayor y junio del año que viene muestran un máximo esperado de 5,2%, cuando el miércoles la cifra era menor a 5%. La tasa actual está en un rango de entre 3,75% y 4%.
“¿Recuerdan el “más bajo por más tiempo” de 2021 en cuanto al entorno de tasas de interés?”, escribió Matt Maley, estratega jefe de mercado de Miller Tabak + Co. “Bueno, ahora tenemos “más alto por más tiempo”... así como “más lento pero más alto”, un aumento de las tasas a corto plazo podría tardar más en producirse, pero se dirigen a un nivel más alto de lo que los mercados han estado pensando”.
Las solicitudes de seguro de desempleo en EE.UU. cayeron ligeramente la semana pasada, y siguen rondando niveles históricamente bajos. El informe refuerza lo que el presidente de la Fed, Jerome Powell, describió como un mercado laboral “sobrecalentado” en el que la demanda de trabajadores supera con creces la oferta. La productividad de los trabajadores estadounidenses apenas aumentó en el tercer trimestre, tras los fuertes descensos del primer semestre del año, aunque lo suficiente como para frenar el ritmo de crecimiento de los costes laborales.
La presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, advirtió que es posible que se produzca una “leve recesión”, pero que no sería suficiente por sí sola para frenar la subida de los precios. Los comentarios forman parte de una serie de apariciones públicas de funcionarios del BCE, mientras los inversores y analistas reflexionan sobre el doble desafío del crecimiento récord de los precios y una probable recesión económica, debida en gran medida a la invasión de Rusia en Ucrania.
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