Bogotá — La compañía de telecomunicaciones Movistar confirmó a Bloomberg Línea que renunció a la asignación temporal del espectro en la banda de 2.500 MHz ante los altos costos que la operación le representaba, estimados en $32.000 millones por un año de uso.
Movistar indicó que renunció al permiso temporal porque el precio era muy alto y que está decisión no afecta su normal operación, según manifestaron fuentes de la empresa a este medio.
Ese permiso temporal del espectro no alcanzó a ser usado por Movistar y le permitiría a la compañía de telecomunicaciones seguir desarrollando sus capacidades de 4G en el país.
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La solicitud de renuncia se hizo por medio de una carta que fue dirigida al Ministerio de Tecnologías de la Información y Comunicaciones colombiano.
El precio de la contraprestación por la asignación directa y temporal de espectro estaría hasta seis veces por encima de los parámetros internacionales.
En un proceso al margen de este, Movistar busca una renovación en la banda de 1.900 MHz, pero ha pedido una revocatoria parcial sobre el valor para que se reconsideren los precios que considera altos por las referencias del mercado. El permiso está vigente por 20 años y el valor se estima en $550.000 millones.
Según un informe de la organización GSMA y la Asociación de la Industria Móvil de Colombia (Asomóvil), si bien Colombia “logró avances importantes en la modernización de las políticas públicas para el desarrollo digital del país (…) el incremento exponencial del tráfico producto de la pandemia global del Covid-19 pone de manifiesto la necesidad de reformas aún más profundas”.
En el informe exhortan a planificar políticas de espectro que impulsen la inclusión digital, dado que los costos anuales de asignación “han sido más altos que el promedio de América Latina desde 2014 en adelante”.
Esto habría tenido serias repercusiones en los servicios móviles, ya si Colombia hubiese tenido precios de asignación de espectro comparables a la media regional hubiese notado un efecto en la cobertura y en velocidades de descarga hasta un 40% más rápidas.
Desde GSMA han calculado que “la cobertura 4G podría haberse incrementado del 71% al 76% de la población para fines del 2019, alcanzando a 2 millones adicionales de potenciales usuarios”.
A principios de este año, Telefónica completó la venta de sus activos de fibra óptica en Colombia por unos US$200 millones a la firma de inversión KKR, lo que dará origen a una sociedad independiente que está valorada en unos US$500 millones.
La nueva sociedad se encargará de desplegar fibra óptica en unas 90 ciudades del país suramericano, con una red que cubrirá a 4,3 millones de hogares, informó en ese entonces el director ejecutivo de Telefónica Colombia, Fabián Hernández.
La venta corresponde al 60% de la cuota de la compañía en la filial de fibra óptica en ese mercado. De esta manera, la empresa avanza en medio de su proceso de desinversiones.
En febrero del año pasado, Telefónica también vendió el 60% de la filial de Chile a KKR por unos US$600 millones y en 2021 también se completó la venta de las operaciones de Telefónica Costa Rica a Liberty Latin America.
