Bloomberg — La compañía Airbnb Inc. (ABNB) dio una perspectiva decepcionante para las reservas en el cuarto trimestre, lo que sugiere que las preferencias de los consumidores se están alejando de los alquileres de mayor costo que prosperaron durante la pandemia y volviendo a los destinos urbanos y transfronterizos. Las acciones cayeron más de un 9% en las negociaciones ampliadas.
El portal de alojamiento compartido con sede en San Francisco dijo que espera que el ritmo de noches y experiencias reservadas se “modere ligeramente” en el cuarto trimestre, en comparación con el aumento del 25% del tercer trimestre. Airbnb informó de 99,7 millones de noches y experiencias reservadas en los tres meses que terminaron en septiembre, lo que no alcanza las estimaciones de los analistas de 99,9 millones.
Airbnb también dijo que espera que las tarifas medias diarias se moderen este trimestre debido a la fortaleza del dólar y a un cambio en la gente que regresa a las ciudades, que tienden a tener tarifas más bajas basadas en alojamientos de menor tamaño. La compañía pronosticó unos ingresos para el cuarto trimestre de entre US$1.800 y US$1.880 millones, con el extremo inferior de ese rango por debajo de la estimación de Wall Street de 1.860 millones de dólares.
El número de noches brutas reservadas transfronterizas aumentó un 58% en el tercer trimestre, mientras que las noches urbanas de alta densidad reservadas crecieron un 27% respecto al año anterior, dijo Airbnb. “A medida que el impacto de la pandemia retrocede, pero las condiciones macroeconómicas persisten, esperamos que una recuperación continua, aunque agitada, de los viajes transfronterizos sea un viento de cola para los resultados futuros”, escribió el consejero delegado Brian Chesky en la carta a los accionistas.
Las perspectivas son moderadas después de que Airbnb registrara durante el verano sus mayores ingresos y su trimestre más rentable. Los ingresos aumentaron un 29% en el tercer trimestre, hasta los US$2.880 millones, superando la estimación media de los analistas de US$2.830 millones. La compañía obtuvo US$1.200 millones de beneficio neto, o US$1,79 por acción, muy por encima de las estimaciones de US$1,53.
Se esperaba que el tercer trimestre fuera una temporada de éxito, ya que Chesky y otros ejecutivos del sector confiaban en la demanda de viajes de verano reprimida tras dos años de restricciones de Covid-19. De hecho, los viajeros parecían pulular por los destinos turísticos más importantes, a pesar de las interrupciones en los aeropuertos y las cancelaciones de vuelos que dispararon los precios de los billetes. Las compañías aéreas, desde Deutsche Lufthansa hasta American Airlines y United, han pronosticado un repunte sostenido de los viajes desde la temprana caída de la pandemia.
Airbnb dijo que la tarifa media diaria de un alquiler aumentó un 5% en el tercer trimestre con respecto al año anterior. El aumento se debió en su totalidad a la revalorización de los precios, según la empresa, que compensó con creces el impacto negativo de un cambio hacia destinos urbanos y otras reservas.
Sin embargo, los viajeros pueden poner un límite al aumento de los precios y algunos anfitriones ya están empezando a ver un retroceso en las reservas para el resto del año. Ello podría deberse a la inflación, que en EE.UU. está en su punto más alto de los últimos 40 años, lo que hace que los precios de los alquileres estén fuera del alcance de algunos, así como al hecho de que ahora hay muchos más anfitriones en la plataforma que antes de la pandemia, lo que provoca un exceso de oferta. Además, en algunos mercados muy activos, que estaban en pleno auge porque la gente se beneficiaba de las políticas de trabajo desde cualquier lugar, los anfitriones están empezando a sentir una pausa. Por ejemplo, la demanda y la ocupación en Lake Tahoe se redujeron un 20% y un 18% en el segundo trimestre en comparación con el año pasado, según datos recopilados por AirDNA.
Airbnb también podría empezar a enfrentarse a una renovada competencia con los hoteles, que ahora están viendo cómo vuelve a haber más inventario en línea después de la derrota de la pandemia, escribieron los analistas de Bloomberg Intelligence Mandeep Singh y Damian Reimertz en una nota antes de que se publicaran los resultados.
En una carta a los accionistas, Chesky se mostró optimista. “Independientemente de las continuas incertidumbres macroeconómicas, creemos que estamos bien posicionados para el camino que tenemos por delante”, dijo. La demanda de huéspedes sigue siendo fuerte, dijo Chesky, añadiendo que las estancias de más larga duración y los viajes no urbanos, características que ayudaron a Airbnb a prosperar durante la pandemia, “están aquí para quedarse, ya que millones de personas tienen una nueva flexibilidad en el lugar donde viven y trabajan.” Incluso con un mayor número de empresas que exigen a sus empleados que vuelvan a la oficina, Airbnb dijo que las noches reservadas para estancias de larga duración se mantuvieron estables en el tercer trimestre con respecto al año anterior, en un 20% del total.
Kevin Kopelman, analista de Cowen Inc. dijo que un fuerte rendimiento en el cuarto trimestre del año pasado, a medida que la variante delta disminuía, prepara a Airbnb para un duro conjunto de comparaciones en el futuro.
Airbnb es la primera de las principales empresas de viajes en presentar sus resultados esta semana, por delante de Booking Holdings Inc (BKNG), que informa el miércoles, y de Expedia Group Inc (EXPE), propietaria del rival de Airbnb, Vrbo, el jueves.
A pesar de su buen rendimiento durante el verano, los inversores han castigado a los valores tecnológicos, muy valorados, a medida que los tipos de interés suben y Wall Street se preocupa por una posible recesión. Las acciones de Airbnb se han hundido alrededor de un 35% este año, en comparación con los descensos de alrededor del 47% y el 22% de sus rivales Expedia y Booking.
La fortaleza del dólar también ha pesado en las empresas con ventas internacionales, desde Alphabet Inc. (GOOGL) hasta Amazon.com Inc. (AMZN) Airbnb no es diferente, ya que más de la mitad de sus ingresos provinieron de monedas extranjeras en el tercer trimestre.
Airbnb recompensó a los accionistas este verano anunciando un programa de recompra de US$2.000 millones, que también ayudó a compensar la dilución de un programa de acciones para empleados. A finales de septiembre, la empresa había recomprado US$1.000 millones en acciones.
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