Bogotá — Este miércoles se reportó que la confianza comercial e industrial de Colombia tocó en septiembre su nivel más bajo del año al situarse en 23,4% y 7%, respectivamente, según datos de Fedesarrollo.
Dado lo anterior, de acuerdo con expertos de investigaciones económicas del Banco de Bogotá, ese revés en las cifras anticiparía la desaceleración que tendría el comercio y la industria en los próximos meses.
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Los expertos del Banco de Bogotá resaltaron en un informe que “en el comparativo mensual, la confianza comercial completó cuatro meses consecutivos de caída, por lo que el balance más reciente se alinea con su mediana histórica, alejándose de lo visto en la primera parte del año, cuando el resultado se ubicaba en máximos históricos”.
Así las cosas, los analistas consideran que “la tracción que venía mostrando el comercio luego de la pandemia moderará un poco más en los próximos meses, por lo que perderá protagonismo en el aporte del crecimiento, más que todo en 2023″.
En tal sentido, factores como la inflación elevada, las tasas de interés altas, la devaluación, la pérdida de confianza del consumidor, las mejoras marginales del empleo, la caída en el ahorro y la incertidumbre política llevan a pensar que, las tasas de crecimiento del comercio serán menores el próximo año, añadieron los expertos.
De otro lado, en el caso de la industria, mencionaron que si bien el ajuste mensual fue marginal de 0,1 puntos porcentuales, esta también completó cuatro meses consecutivos de bajadas. Además, alcanzó el registro más bajo desde junio del año pasado. “La encuesta también apunta a una moderación en el crecimiento de la industria en los próximos meses”, comentó el equipo económico del Banco de Bogotá.
Para los expertos, “la desaceleración global llevará a una menor demanda externa (retroceso en las exportaciones no tradicionales) que implique un menor nivel de producción”.
Así mismo, expresaron que “los sondeos de expectativas muestran que el contexto político; enmarcado por la reforma tributaria, el cambio de Gobierno y los futuros proyectos de ley, es el principal factor de incertidumbre en el sector”.