Bloomberg — La jefa de Comercio del presidente Joe Biden dijo el viernes que espera reunirse “muy pronto” por primera vez con la nueva secretaria de Economía de México, y que las preocupaciones de Estados Unidos sobre la política energética mexicana son más amplias que el impacto en las empresas individuales.
Estados Unidos mantiene consultas con México que comenzaron en agosto, dijo el viernes la representante comercial, Katherine Tai, en una entrevista en la oficina de Bloomberg en Washington. Por parte de México, las conversaciones ahora serán dirigidas por Raquel Buenrostro, la exjefa de la agencia tributaria que el presidente Andrés Manuel López Obrador designó en su nuevo cargo a principios de este mes.
Hasta ahora, el Gobierno mexicano se ha centrado en resolver casos individuales con empresas estadounidenses y canadienses en un esfuerzo por tratar de disipar la disputa.
Pero Tai no descartaría solicitar la formación de un panel para resolver el conflicto, que según dijo a principios de este año pone en riesgo más de US$10.000 millones de inversión estadounidense por el trato considerado arbitrario a las empresas, especialmente en energías renovables.
“Cuando uno es el demandante, está en el asiento del conductor”, dijo Tai. Estados Unidos seguirá en las conversaciones “mientras esas consultas sean significativas”, dijo.
La política de López Obrador privilegia a la compañía estatal Petróleos Mexicanos (Pemex) y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE). EE.UU. dice que esto viola el acuerdo comercial T-MEC entre EE.UU., México y Canadá, que entró en vigor en 2020 para reemplazar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) que estuvo vigente por dos décadas. Canadá presentó una solicitud similar de conversaciones sobre la política eléctrica de México.
El trato injusto se trata de “algo más que el impacto en empresas individuales”, agregó Tai.
La solicitud de arbitraje se abrió como una opción para EE.UU. después de que el período obligatorio de 75 días para las discusiones bajo el T-MEC expirara a principios de este mes. Pero EE.UU. y México acordaron extender las negociaciones más allá de ese plazo inicial, según lo permite el acuerdo.
López Obrador rechaza que sus políticas violen el pacto y dice que EE.UU. debe respetar la soberanía de México.
Si un panel fallara en contra de México, el país latinoamericano podría tener que pagar aranceles por hasta US$30.000 millones en exportaciones, según dijeron a Bloomberg News antiguos funcionarios que negociaron el acuerdo en el momento en que EE.UU. y Canadá presentaron la queja por primera vez en julio.
Muchos analistas vieron la elección de Buenrostro por parte de López Obrador como un endurecimiento de su postura hacia los temas comerciales. Como jefa de la oficina de impuestos ,la funcionaria recaudó miles de millones de dólares a través de una ofensiva contra grandes empresas propiedad de algunos de los empresarios más ricos de México, acusándolas de abusar de los vacíos legales.
Lea más en Bloomberg News