Bloomberg — El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, redobló sus críticas contra la autoridad electoral del país luego de que esta rechazara una solicitud para investigar a las radioemisoras por presuntamente dar prioridad a su oponente, Luiz Inácio Lula da Silva.
En una intervención en el palacio presidencial el miércoles, Bolsonaro arremetió contra Alexandre de Moraes, titular de la corte electoral, y adelantó que apelará su negativa. El 30 de este mes se celebrará la segunda vuelta de los comicios presidenciales brasileños.
“Llegaremos hasta las últimas consecuencias, de acuerdo con lo que establece la Constitución, y probaremos lo que indican nuestras auditorías, que existe verdaderamente una enorme desigualdad”, afirmó.
Las denuncias del presidente Bolsonaro llegan a raíz de un conjunto de desaciertos en su campaña y de un escandaloso incidente que implicó a uno de sus más acérrimos asociados, que le obligaron a mantenerse a la defensiva durante algunos días. Sin embargo, la iniciativa de denunciar un injusto proceder de las radioemisoras y de la autoridad electoral es una decisión que no ha sido tomada en el seno de su campaña, por lo que varios consultores están preocupados por la posibilidad de que los electores la consideren parte de la estrategia de preparación para una eventual derrota este domingo.
Lula dijo que tales acusaciones muestran que Bolsonaro está desesperado. “La campaña está llegando a su fin y se dio cuenta de que puede perder las elecciones”, dijo en una entrevista radial el jueves.
Bolsonaro contra Moraes
La disputa entre el presidente conservador y Moraes, un juez del Tribunal Supremo que encabeza una amplia investigación sobre desinformación, se centra en el tiempo de emisión de la propaganda electoral. Por ley, las emisoras de radio y televisión deben asignar el mismo tiempo a cada aspirante a la presidencia en la recta final de la carrera.
El lunes, los abogados de la campaña de Bolsonaro dijeron que los locutores de las regiones del norte y noreste de Brasil, baluartes del apoyo al retador izquierdista, habían reproducido una cantidad desproporcionada de anuncios radiales de Lula.
Moraes, quien a menudo choca con Bolsonaro por sus ataques a las instituciones de Brasil, dijo que no proporcionó pruebas. También ordenó una investigación sobre la campaña del presidente por un posible intento de perturbar las elecciones.
Las tensiones son altas antes de la votación del domingo, con encuestas que muestran que Lula tiene una estrecha ventaja. Mucho antes de que comenzara la campaña de este año, el titular planteó dudas sobre el sistema de votación electrónica de Brasil, lo que generó temores de un posible resultado impugnado si pierde.
En su discurso, Bolsonaro también afirmó, sin aportar pruebas, que tuvo un desempeño inferior en la primera vuelta en las ciudades que no emitieron sus anuncios de campaña.
“Mi lado se ha visto muy perjudicado, y no sólo ahora”, dijo.
Con la asistencia de Simone Iglesias.
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