La cultura dominicana y su carácter distintivo son representadas en las joyas de Joarla Caridad, una joven diseñadora y orfebre que transforma los fósiles de ámbar y larimar en piezas únicas.
Sus originales y peculiares diseños están atrayendo al mercado de las copias y falsificaciones. Las icónicas piezas de dulce pilón, los emblemáticos rolos de pelos y piscinas la han hecho resaltar en el diseño de joyas en República Dominicana.
La diseñadora de 28 años creció rodeada de piedras preciosas autóctonas de los dominicanos. Desciende una familia de orfebres con más de 40 años en el negocio y fundadores del Museo Mundo de ámbar y el Museo de Larimar Dominicano.
Piedras preciosas dominicanas
El ámbar es una resina fósil de miles de millones de años, los principales yacimientos se encuentran en algunos países de Europa, y en Latinoamérica: en México, República Dominicana, Colombia y Nicaragua.
Mientras que, el larimar es una pectolita encontrada sólo en el país caribeños en sus variantes de tonos azules y verdes.
En conversación con Bloomberg Línea, Joarla explicó que creció aprendiendo de la importancia de ambas piedras y pudo ver la euforia del mercado internacional cuando el larimar alcanzó su repunte.
“Son piedras que desde muy temprana edad comencé a apreciar su valor”, dijo.
Sus planes eran estudiar moda, pero fue atraída por las bellas artes y el poder contar historias a través de sus creaciones. Su historia dio un giro cuando tomó un curso de “Joyería para países en vía de desarrollo” en China, patrocinado por la Oficina de Negocios Internacionales del país asiático en República Dominicana. Ahí descubrió que la orfebrería era su pasión.
Luego se embarcó en aprender joyería contemporánea en Central Saint Martins, en Londres en el Reino Unido, por tres años.
Una de las cuestiones que la llevó a crear piezas distintas fue la interrogante del “¿por qué la joyería tiene que ser como siempre la hemos visto?”, dijo.
Exportación de joyas en República Dominicana
De manera general, la joyería de piedras preciosas se encuentra entre los principales rubros de producción y exportación del país caribeño.
La joyería y sus partes están entre los 10 principales productos de exportación de República Dominicana. En nueve meses del 2022 (enero a septiembre) las exportaciones de de joyería cifró los US$459,63 millones, según los datos de Pro Dominicana.
En 2021 habían 13 empresas de joyerías operando bajo el régimen de zonas francas, con una inversión acumulada de US$25.908.01,3, aportando el 10,6% del total exportado por el sector y empleando 2.584 personas.
El pasado año, las exportaciones del sector joyería fueron de US$762,8 millones. En una década (2012-2021) las exportaciones de joyas alcanzaron los US$4.416,79 millones, de acuerdo con los datos del Consejo Nacional de Zonas Francas (CNZF).
Como una forma de impulsar la artesanía local, desde 2016 una resolución del Ministerio de Energía y Minas prohíbe la exportación de ámbar y larimar en su estado concentrado y semiprocesado.
Colecciones
La diseñadora resalta que su carrera inició en 2016, antes de irse a Londres, cuando sacó su primera colección inspirada en la rotación de los planetas. En el mismo año, comenzó a inspirarse en la cultura dominicana, no solo con piedras únicas del país, sino con creaciones que simbolizaban la idiosincrasia de las dominicanas: el hacerse rolos en el pelo, pero ahora llevarlos en las joyas.
Dos años después, creó las piezas de pilón, inspiradas en un tradicional dulce dominicano, la joya más falsificada, pese a estar registrada, la más vendida y la de mayor diversidad en colores y piedras.
“Trate de que en el diseño del pilón tú quieras pegarle una mordida”, agregó.
El Caribe en una joya
Su añoranza por estar en su país una fría navidad londinense, fue la musa de una de las piezas que más la ha internacionalizado, la piscina.
“Yo tenía mis piedras de larimar y me decía, yo quiero estar ahí dentro, en esa agua cristalina, cálida”, agregó.
El anhelo por estar en casa la motivó a crear la pieza, pensando en una insignia para las personas que están lejos del Caribe o que en cualquier parte del mundo la vean y digan “yo quiero estar ahí o pronto estaré ahí”.
La Pyme bajo marca de Jorla Caridad Jewellery, coloca sus productos en Estados Unidos como principal mercado internacional y en República Dominicana como mayor consumidor de sus productos. Aunque han enviado productos a Italia, España y Holanda.
Para los próximos años proyectan una mayor internacionalización y entrar a los mercados de Latinoamérica.