Por qué las rondas millonarias en startups vuelven a activarse en el remate de año

Muchas startups colombianas han nacido y han sabido convivir con las dificultades, por lo que en un escenario como el actual se estarían adaptando a las condiciones y los fondos lo están valorando

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Bogotá — En medio del invierno que aún golpea a las startups y que dificulta el acceso al capital de riesgo en Latinoamérica, los negocios en Colombia se han mantenido resilientes y en los últimos días han cerrado millonarias rondas.

Primero, la startup desarrolladora de restaurantes virtuales y cocinas ocultas colombiana Foodology anunció que recaudó US$50 millones con inversores como el cantante Maluma y el fondo de capital de riesgo de Abu Dabi Chimera.

Asimismo, Elenas, una startup colombiana de tiendas virtuales para mujeres, recaudó US$20 millones. Y con poco tiempo de diferencia la startup colombiana Vozy, que combina tecnologías de voz e IA para mejorar la experiencia al cliente, informó que levantó US$5 millones.

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En contra corriente de lo que pasa en otros mercados, el capital sigue fluyendo en Colombia al ritmo de la internacionalización de muchas empresas, que le están dando un vuelco a su estrategia para dar prioridad a aspectos como la rentabilidad y un crecimiento más saludable para dejar a un lado la quema de capital.

Este vuelco en las reglas de juego que empiezan a asimilar las startups locales las estaría beneficiando en pro de la confianza de los fondos de inversión.

En entrevista con Bloomberg Línea, Zach Oschin, CEO y fundador de Elenas, manifestó que dado que el ecosistema afronta este inverno y las dinámicas con los inversionistas están cambiando, la realidad es que el mercado está siendo más conservador y “se está enfocando más en los perfiles de margen y la rentabilidad del negocio”.

“Al menos en Elena es en lo que nos hemos enfocado por mucho tiempo. Es asegurar que tenemos un modelo sostenible y rentable desde el día uno. Que puede seguir creciendo sin una inversión loca o un gusto loco en subsidiar las cosas”, apuntó.

“Y siento que lo que estamos viendo en Colombia (con una nueva ola de rondas de inversión), es por el tamaño de mercado. (…) El año pasado cuando el mundo se estaba volviendo loco y todo el dinero estaba entrando y las compañías estaban levantando montos ridículos, creo que también las compañías colombianas siempre han tenido que mostrar un crecimiento muy fuerte posiblemente con menos dinero, con márgenes mas rentables, para también ganar en el mercado, solo por el temaño de la economía y la posición que tiene. Ahora que las cosas han cambiado y el dinero no está tan fácil de recibir, creo que también las empresas colombianas están muy bien posicionadas de tener negocios más resilientes y que ya están acostumbrados a este nivel de exigencia de los fondos”.

Diego Noriega, socio gerente del fondo de capital de riesgo Newtopia VC, explica a Bloomberg línea que esta dinámica “es fruto del trabajo que se viene haciendo hace más de diez años en el ecosistema colombiana de startups”.

“Ahora se recogen los frutos de lo sembrado anteriormente, de la política de Estado con Innpulsa, del trabajo ecosistémico que han tenido estos proyectos. Sin lugar a dudas tiene que ver mucho con el trabajo hecho en los últimos diez años”, señaló.

Para Diego Noriega, el tema que debería revisarse es cómo hacer que la siguiente generación de statups también tengan esta evolución y puedan seguir sacando unicornios desde Colombia.

“No va a ser fácil, pero hay que trabajar con consistencia y con mucho sentido asociativo también entre fondos, ONG, programas de gobierno, y corporaciones también para que el acompañamiento de esos emprendedores tenga mucho impacto, potencia y sean compañías más apetecibles para los fondos de inversión que vienen de afuera y estén haciendo estas rondas”, apuntó.

Por otro lado, manifestó que también influye el hecho de que se trata de compañías que priorizan el tema de la rentabilidad y dijo que hoy Latinoamérica tiene un contexto muy favorable en ese sentido en comparación con otras regiones del mundo.

“En ese sentido, es una buena alerta para las otras startups que están buscando siguientes rondas de inversión de hacer las cosas bien, que tengan prioridad en crecimiento, pero también en el Ebitda y una muy clara proyección hacia la rentabilidad, que es hoy es lo que se está priorizando. El 2023 va a ser un año muy complejo, lo mismo que el 2024, si bien Latinoamérica está en un contexto menos desfavorable que el resto del mundo, todavía hay que hacer muchísimos esfuerzos para tener compañías sustentables”, dice.

En línea con lo anterior, destacó puntualmente casos de startups colombianas como la plataforma de empleo Hunty, que evolucionó su modelo de negocio al complementar el modelo B2C (negocio a consumidor) a BTB (negocio a negocio).

También se refirió a la plataforma de mantenimiento de carros Alfred, que ha recaudado cerca de US$3,5 millones, “y ahora está levantando un poquito más, pero haciendo los números mucho más justos, con menos burning (quema de capital)”, lo que se complementa con mayores ofertas al segmento BTB.

“Esto las hace más apetecibles para ser invertidas por fondos de México y EE.UU. por demostrar escalabilidad en el modelo de negocio”, dijo.