Buenos Aires — Los billetes de $1.000 ya son los de mayor circulación en la Argentina. Pese a que todavía no se cumplieron cinco años desde que fueron emitidos por primera vez, los billetes que llevan la figura del hornero superaron a los de $100 y pusieron fin a una hegemonía que llevaba no menos de dos décadas.
La brusca aceleración de la inflación y la pérdida del poder adquisitivo del peso en los últimos años llevó a que en menos de tres años los billetes de $1.000, los de mayor denominación del país, pasaran de representar menos del 6% del share a más del 30%. En la vereda de enfrente quedaron los de $100, que pasaron de explicar el 46,8% de la circulación a fines de 2019, cuando asumió el Gobierno de Alberto Fernández, al 29,7% en la actualidad.
Según reveló la Comunicación C93729 emitida ayer por el Banco Central (BCRA), al cierre de la primera quincena de octubre había en circulación 2.250,4 millones de billetes de $1.000 y 2.175,9 millones de billetes de $100.
Así, por primera vez desde que el BCRA emite este tipo de comunicaciones mediante las cuales detalla la cantidad de billetes y monedas en circulación según denominación (empezó a hacerlo en 2003) los billetes de $100 no son los que más circulan en el país en términos de cantidad.
Tal ha sido la pérdida del poder adquisitivo de la moneda argentina en los últimos años que el Gobierno debió retirar de circulación las denominaciones más bajas y priorizar la impresión de los de mayor denominación.
Solo en el último año, la cantidad de billetes de $1.000 creció 81,7% al pasar de 1.238,2 millones de unidades a mediados de octubre de 2021 a los 2.250,4 millones actuales. Eso implica que casi un 45% de todos los billetes de $1.000 que circulan hoy fueron puestos en circulación en los últimos 12 meses. Recorrido inverso recorrieron los billetes de $100: hoy hay 443,1 millones de unidades menos que hace un año.
Si se amplía más el espectro puede verse que la cantidad de billetes de $1.000 en circulación se disparó 621% bajo la gestión de Alberto Fernández al pasar de 312,3 millones de unidades en diciembre de 2019 a 2.250,4 millones hoy. Eso implica que más de un 86% de los billetes que llevan la imagen del hornero fueron puestos en circulación bajo el gobierno del Frente de Todos.
De esta manera, de cada 100 billetes que circulan hoy en la Argentina, 30,7 son de $1.000; 29,7 de $100; y 17,9 de $500. Entre estas tres denominaciones explican el 78% de los 7.320,3 millones de billetes en circulación.
Muy por debajo quedan los de $10 que explican 6,8% del share; los de $200, con otro 6,8%; los de $20, que representan un 5,4% del total de billetes; y los de $50, que explican apenas el 2,6%.
Otro enfoque aporta el economista y ex gerente general del Banco Central, Nicolás Gadano. Según calculó, los billetes de $1.000 ya explican el 70% del valor de la circulación monetaria. Es decir, si se multiplica la cantidad de unidades por el valor del billete, el 70% de la circulación monetaria está explicada por los billetes que llevan la imagen del hornero.
De esta manera, continúan acercándose así al otro récord que aún ostentan los billetes de $100: haber explicado más del 90% de la circulación monetaria en 2014 y 2015.
A la espera de la nueva familia
Pese a que fueron presentados en mayo, la nueva familia de billetes aún no parece estar próxima a llegar a las calles de la Argentina. El Gobierno mismo reconoció a mediados de septiembre, a través del Informe de Gestión que presentó el jefe de Gabinete, Luis Manzur, en el Congreso, que el proceso productivo de impresión de la nueva familia no se había iniciado.
Lo cierto es que la puesta en circulación de la nueva familia de billetes viene siendo anunciada por el Gobierno hace más de un año. Es que si bien los flamantes diseños fueron presentados en mayo pasado, ya desde mediados de junio de 2021 que el Frente de Todos amaga con su llegada. En aquella oportunidad había sido el propio Alberto Fernández quien había dicho, en un acto en Salta por el 200 aniversario de la muerte de Martín Miguel de Güemes que había instruido al BCRA a incluir la imagen del prócer en la nueva emisión de billetes.
