Bogotá — Bloomberg Línea conoció en primicia que el Gobierno Petro, en cabeza del Ministerio de Hacienda, tomó la decisión de no vender ninguna de las electrificadoras en las que tiene participación. Aunque ya se había expresado la voluntad de no privatización de estas firmas, en septiembre esta cartera había puesto sobre la mesa la posibilidad de vender estos activos al Grupo de Energía de Bogotá (GEB) o a Empresas Públicas de Medellín (EPM) para mantener su estatus público y en medio de la necesidad de tener otra fuente de ingresos. Sin embargo, este medio confirmó que ello quedó descartado.
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La razón: conglomerados como el GEB tienen una participación del sector privado que, aunque es minoritaria, genera ruidos para el Ejecutivo y para el Pacto Histórico, la coalición de Gobierno, especialmente por la línea roja que ha trazado el Presidente de la no privatización.
Incluso, confirmamos que el Ministerio de Hacienda ya no tiene contemplada esta fuente de ingresos en el Presupuesto General de la Nación.
Lo anterior sucede cuando están a punto de conocerse los resultados de la valoración externa que contrató esta cartera para saber con exactitud cuánto vale cada una de las electrificadoras en las que tiene participación el Estado.
De un total de 10, son 7 las que se habían contemplado para la venta: Centrales Eléctricas del Cauca (Cedelca), donde el Gobierno tiene una participación de 55%; Centrales Eléctricas de Nariño (Cedenar), donde hay una participación de 99%; Empresa Urrá (con participación de 99%); Electrificadora del Meta (Emsa), con una participación de 55%; Electrificadora del Huila (Electrohuila), con 83%; Electrificadora del Caquetá (Electrocaquetá), con una participación de 72% del Estado, y Empresa Distribuidora del Pacífico (Dispac), que tiene una participación del Gobierno de 100%.
En este proceso, el Grupo de Energía de Bogotá ya había mostrado su interés por dos de estas electrificadoras: la del Huila y la del Meta, señalando que estas regiones recibirían dividendos importantes para su financiación.
La venta de estas electrificadoras es una alternativa que desde el Gobierno pasado ha estado sobre la mesa. Luego de la venta de la participación estatal en ISA a Ecopetrol, se evaluó la opción de salir de otras participaciones en empresas del sector eléctrico. No obstante, no se concretaron más ventas.
El año pasado un informe de investigaciones económicas de Corficolombiana resaltaba que la nación cuenta con una participación mayoritaria en 10 empresas del sector eléctrico; tres firmas de generación, cuatro distribuidoras y comercializadoras y tres compañías con administración especial (contratos de arriendo de activos de generación, operación de activos de distribución y administración). Y que “el valor patrimonial total de estas empresas asciende a $2,7 billones. Nuestro ejercicio de valoración ubica al valor de mercado de estas participaciones en $3,6 billones”.