Ciudad de México — El precio de la tortilla no bajaría en los siguientes meses a pesar de que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador relanzó el Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), el cual busca que las principales empresas productoras de harina de maíz no aumenten el precio, dijo Blanca Mejía, presidenta de la Red de Maíz de la Ciudad de México.
Señaló que las medidas gubernamentales del PACIC destinadas a la tortilla no tienen impacto directo en el sector, ya que existen aumentos “desproporcionados” de las harinas y de otros insumos, así como incertidumbre con las compras de maíz a los productores que no respetan los precios pactados antes de la cosecha.
En conferencia acusó que las medidas anunciadas por el Gobierno federal el pasado tres de octubre serán insuficientes, toda vez que la empresa harinera firmante del PACIC aplicó el descuento en el producto de menor consumo y menos recomendado para las tortillerías.
¿Cuándo subirá el precio de la tortilla?
El precio actual de la tortilla de maíz es de MXN$20 por kilo en la Ciudad de México, de acuerdo con el Sistema Nacional de Información e Integración de Mercados.
Se trata de un precio que fue ajustado a finales de marzo como consecuencia del inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania, la cual derivó en un aumento en el precio de commodities, entre ellos el maíz.
Antes de la guerra el precio de la tortilla era de MXN$18 por kilo en la capital del país, mientras que el precio de este alimento básico era de MXN$14 por kilo en los meses en los que inició la pandemia de Covid-19 en febrero y marzo de 2020.
Blanca Mejía dijo en entrevista que, si bien no hay una fecha precisa en la que se tenga planeado subir el precio de la tortilla, ante el aumento en los costos de producción, hacia el mes de febrero de 2023 se evaluaría aumentar el precio de la tortilla.
Estimó que ante el entorno de incrementos en los insumos, la tortilla podría alcanzar un precio de MXN$24 por kilo.
“El presidente marcó que el Pacto era hasta febrero, las harineras van a respetar el precio para febrero y eso nos hace sospechar que para esos meses si existe un aumento se tendrán que ajustar los costos de producción también de la tortilla y de venta”
Blanca Mejía, presidenta de la Red de Maíz de la Ciudad de México
PACIC insuficiente
Grupo Gruma-Maseca y Grupo Minsa son las dos empresas productoras de harina que firmaron el llamado PACIC 2.0 en Palacio Nacional.
El PACIC 2.0 establece que, en cuanto a la harina de maíz utilizada para la tortilla, las empresas asumen el compromiso de no subir sus precios durante la vigencia del acuerdo, en específico por lo que hace a la harina básica extra premium, sin conservadores.
La meta de esa medida es que se alcance un precio promedio 3% menor al máximo promedio actual.
No obstante, Blanca Mejía dijo que los contratos anuales de las productoras de harinas obligan a un consumo mensual sin respetar el precio del acuerdo inicial.
Señaló que existe incertidumbre para los compradores de maíz, ya que a pesar de tener un precio pactado con los productores, no se respeta y en algunas ocasiones se rompe el acuerdo y se devuelve el dinero entregado por anticipado.
Indicó que desde el inicio de año hasta el mes de agosto de 2022 las harineras han incrementado el precio de la tonelada de harina del maíz hasta en MXN$3.090, lo que se repercute en MXN$1.50 en cada kilo de tortilla que se vende al público.
Además, mencionó que a la fecha no se tienen noticias oficiales sobre la medida de la reserva estratégica de maíz a cargo de Segalmex anunciada en mayo, cuando se lanzó por primera vez el PACIC.
La Red de Maíz de la Ciudad de México indica que para que mejoren las condiciones de mercado y se vean reflejadas en el precio del kilo de tortillas en los siguientes meses, además de tener una mayor producción de maíz, se deben instalar centros regionales de acopio y distribución, así como un fondo para su adquisición.
Asimismo, mejorar las técnicas de siembra de maíz para que el campo sea más productivo y se obtengan mejores costos para los productores y compradores del grano.
El 95% de la tortilla que se vende en México se hace en tortillería, y su producción se encuentra dividida en un 50% en masa nixtamalizada y el 50% restante en harina de maíz.