Montevideo — El Fondo Monetario Internacional (FMI) espera que la inflación anual en Uruguay se ubique en 8,9% para fines de 2022 y en 7,2% en diciembre del año próximo, según un reporte del organismo divulgado este lunes. Entre sus proyecciones, el FMI también prevé un crecimiento para la economía uruguaya de 5,3% del Producto Interno Bruto (PIB) para 2022 y de 3,6% para 2023.
La proyección de la inflación para Uruguay de la última versión del World Economic Outlook del FMI está en línea con las expectativas de los analistas y agentes del mercado, ya que la mediana de la encuesta de setiembre del Banco Central del Uruguay (BCU) marcó un Índice de Precios al Consumo (IPC) en 8,9% en diciembre de 2022. En tanto, el gobierno uruguayo espera que el indicador se ubique en 8,5%, con base en las últimas declaraciones de jerarcas.
El rango meta del BCU para la inflación, en cambio, es de entre 3% y 6%.
El reporte de octubre también marcó una revisión al alza de la inflación proyectada por el FMI, ya que en el anterior informe de abril el IPC esperado para fin de año era de 6% para 2022 y 5% para 2023.
La inflación en Uruguay se reaceleró en setiembre y se ubicó en 9,95% en la medición interanual. Además el IPC mensual superó en setiembre las expectativas de los analistas por cuarto mes consecutivo.
La marcha de la economía
En el caso de la previsión del FMI sobre el ritmo de la economía uruguaya, el crecimiento esperado de 5,3% para 2022 está por encima del 5% que marcó la mediana de la última consulta del BCU y del 4,8% proyectado por el Poder Ejecutivo. De este modo el FMI revisó al alza la proyección realizada en abril de un crecimiento de 3,9% del PIB para Uruguay en 2022.
En cuanto al mercado laboral, el FMI espera que la tasa de desempleo en Uruguay se estanque y proyecta un 7,9% tanto para 2022 como 2023.
El FMI volvió a mejorar su pronóstico de crecimiento para la economía de América Latina y el Caribe en 2022 hasta 3,5%, un 0,5% por encima de su pronóstico de julio. Las nuevas proyecciones están 1% por encima de la revisión de abril.
