Ciclón tropical Julia comprometió seguridad alimentaria de Honduras: Gobierno

El Instituto Nacional Agrario (INA) señala que las pérdidas están por los US$60,5 millones. Cultivos de banano y palma aceitera, los más afectados

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San Pedro Sula — Las instituciones hondureñas siguen haciendo balances para cuantificar el daño que dejó el ya disipado ciclón tropical Julia, que según la Secretaría de Estado en los Despachos de Gestión de Riesgos y Contingencias Nacionales (Copeco) afectó a unas 103.960 personas.

En el sector agroalimentario, autoridades del Instituto Nacional Agrario (INA) estiman pérdidas preliminares de 1.500 millones de lempiras (HNL), es decir, US$60.5 millones, a causa de inundaciones y deslizamientos de tierra, que se suman a los desastres reportados a finales de septiembre por las lluvias de la temporada.

“Aquí se vieron afectados, pequeños, medianos y grandes productores. La soberanía alimentaria está comprometida”, dijo Rafael Alegría, subdirector del INA, quien añadió que, aunque el daño en rubros como granos básicos, aves de corral y ganadería es a nivel nacional, los departamentos más afectados son Yoro, Cortés, Santa Bárbara, Copán, Choluteca y Valle.

El funcionario dijo que el INA, junto con el Instituto Hondureño de Mercadeo Agrícola (IHMA), el Banco Nacional de Desarrollo Agrícola (Banadesa) y la Secretaría de Agricultura y Ganadería (SAG), están por definir una estrategia para sembrar maíz y frijol en otras zonas que les permita mitigar un poco más los efectos de futuros desastres.

Daños en los cultivos de banano

También cuadrillas de la SAG han constatado los daños del ciclón tropical en plantaciones de banano y palma aceitera, ambos sectores significativos para las exportaciones de Honduras.

Solo en el municipio de San Manuel, ubicado a 28 kilómetros de San Pedro Sula, productores estiman pérdidas de unas 279 hectáreas de cultivo de banano, que en divisas equivalen a 70 millones de lempiras, US$2.8 millones de dólares.

Unas de las empresas afectadas es Devonia y Devon Bananas, donde su gerente Francis Charles Ewens Mejía dijo que las filtraciones de aguas subterráneas provenientes del río Chamelecón han ocasionado desastres en la finca. “El daño de las plantas se nota con el amarillamiento de las hojas”.

Después de Costa Rica y Guatemala, Honduras es el tercer exportador de banano en Centroamérica, pero los huracanes Eta y Iota de noviembre de 2020 ocasionaron pérdidas cuantiosas en el rubro, que hasta hace poco los productores seguían recuperándose de forma gradual con nuevas áreas cultivadas. A julio de 2022, las exportaciones de la fruta le dejaron al país US$343.5 millones, según el reporte de comercio exterior del Banco Central de Honduras (BCH).

Ahora con Julia, la titular de la SAG, Laura Elena Suazo, dijo que además de hacer una estimación de los daños, están por elaborar una propuesta conjunta entre la empresa privada, la banca y el gobierno, “a fin de encontrar un mecanismo que ayude a levantar a este rubro”.

Producción de palma aceitera inundada

Según reportes de entidades estatales, el rubro de la palma aceitera es uno de los más dañados del sector agroindustrial con afectaciones en su rendimiento productivo y destrucción total de cultivos que estaban recién sembrados.

La SAG estimó a principios de semana que unas 49.000 hectáreas de palma aceitera en los departamentos de Cortés y Atlántida fueron inundadas por las lluvias derivadas de Julia.

“El impacto en las pérdidas económicas en la palma es muy alto y aún se están analizando y corroborando los datos que serán entregadas a la titular de la SAG, junto con una estrategia de respuesta de apoyo a los productores”, dijo José Sánchez Albino, asesor económico y coordinador del equipo que hizo un recorrido en las diferentes plantaciones del litoral hondureño.

El cultivo de palma se ubica entre los cinco primeros rubros de exportación de Honduras. La mayor producción de palma aceitera se registra al norte y el litoral del país en los departamentos Atlántida, Cortés, Colón y Yoro.

El país centroamericano cuenta con 198.000 hectáreas sembradas de palma aceitera, con una producción anual de 2.4 millones de toneladas de fruta y 480.000 toneladas de aceite crudo. En los últimos cinco años se han generado un promedio de US$350 millones anuales por concepto de exportaciones, conforme a reportes del BCH.